Santiago Peña, representante del Partido Colorado, se convirtió en estas elecciones 2023 en el presidente electo de Paraguay, con un 42,74%, frente al titular del Partido Liberal Radical Auténtico, Efraín Alegre, quien pugnaba por la Concertación Nacional y se quedó con el 27,48% de los votos.
El ex ministro y economista de profesión, que anteriormente pertenecía al Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), gobernará el país con 44 años desde agosto próximo, consolidando con esto la hegemonía de la Asociación Nacional Republicana (ANR), que ya lleva más de 70 años en el poder, ante la falta de alternancia.
Gana cartismo con futuro incierto de Cartes
Peña se acogerá al cargo respaldado por la figura de su mentor y líder, el ex presidente de la República Horacio Cartes (2013- 2018), quien fue designado significativamente corrupto y sancionado por Estados Unidos, por presuntos hechos de corrupción y vínculos con el terrorismo.
Tras proclamarse ganador virtual en los comicios de este último domingo, el electo presidente agradeció a “su querido” Partido Colorado, pese a que se enroló a sus filas hace pocos años, así como agradeció de forma especial al ex mandatario, cuyo futuro político queda a la expectativa.
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Ante la evidente falta de unidad real con el sector de Fuerza Republicana, movimiento liderado por el actual presidente de la República, Mario Abdo Benítez, el ganador final de estas contiendas es el cartismo, mientras que Peña llevará la tarea de lograr finalmente la unidad en busca de gobernabilidad.
Con menos de un año de afiliación colorada, Santiago Peña fue propuesto en el 2017 por el movimiento Honor Colorado como precandidato presidencial, pero fue derrotado en las internas frente a Abdo Benítez.
De la mano del mismo sector que lo presentó la primera vez, se volvió a candidatar para la interna del 2022, donde superó en caudal de votos al candidato del abdismo, el ex ministro de Obras Públicas Arnoldo Wiens. Este último, tras su derrota, mostró un fuerte apoyo al candidato colorado y se consagró con un puesto de asesor en la Itaipú Binacional.
Control de la ANR en el Congreso
Las octavas elecciones generales de la era democrática, que se desarrollaron en la víspera y en las que casi 4,8 millones de ciudadanos estaban convocados para elegir también a los parlamentarios revelaron que el Partido Colorado consiguió una mayoría aplastante tanto en la Cámara de Senadores como la de Diputados, por lo que tendrá en sus manos el control del Congreso Nacional.
Los colorados se quedaron con 23 escaños para el próximo periodo en el Senado; Cruzada Nacional desplazó al Frente Guasu, con cinco lugares; Patria Querida se quedó con una banca; la Alianza Encuentro Nacional con dos, y el Partido Liberal perdió uno, quedando con 12 en total.
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En Diputados, los colorados se quedaron con una mayoría aplastante de 48 bancas, con lo que tienen el poderío incluso para realizar una sesión o dejarla sin cuórum, aprobar o rechazar proyectos, incluso sancionar o destituir diputados, sin la necesidad de otras bancadas.
Los partidos o movimientos de oposición, en tanto, lograron conformar un total de 32 bancadas, entre las cuales la juventud de partidos no tradicionales es la novedad, mediante la figura de Johanna Ortega, de País Solidario, además de Rubén Rubin y Raúl Benítez, ambos de Encuentro Nacional.
El Encuentro Nacional se mantiene con dos bancas; Patria Querida se redujo a una sola; el movimiento Yo Creo conformó una nueva bancada, con dos miembros; Cruzada Nacional logró cuatro bancas, tras contar con solo una; mientras que el PLRA, entre alianzas y concertaciones, quedó con 21 bancas.
Apogeo del liderazgo de Payo Cubas
Los datos del sistema de transmisión de resultados electorales preliminares (TREP) del Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) revelaron que en tercer lugar se situó el candidato independiente y antisistema Paraguayo Cubas, quien marcó un 22,91%, lo que implicó un total de 692.663 votos.
Además, el movimiento que lidera Cubas, Cruzada Nacional, ahora ocupa la tercera fuerza de la izquierda en el Congreso Nacional, debido a que incluso logró desplazar al Frente Guasu, que fue la tercera fuerza por dos periodos consecutivos desde el 2013.
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En la Cámara de Senadores se quedaron con cinco postulantes, de los cuales dos son conocidos por su activismo social en el Este del país, mientras que los otros tres son figuras nuevas para la arena política. En tanto, en Diputados lograron cuatro bancas, luego de contar con solo una.
Caída de Lugo, Efraín y PPQ
Un aspecto relevante que queda por analizar tras las elecciones 2023 es que aparentemente se puso fin al luguismo, debido a que el Frente Guasu Ñemongeta dejó afuera al ex presidente de la República Fernando Lugo y sus leales Sixto Pereira, Hugo Richer, Miguel Kencho Rodríguez y Carlos Filizzola, quienes buscaban ser reelegidos.
Así lo reconoció el propio Richer, quien dijo que sí esperaba una disminución en la votación del Frente Guasu, pero “no esperaba este resultado”. “Lo que empezó con Fernando Lugo, aquel 15 de agosto de 2008, terminó ayer”, expresó el parlamentario.
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El Frente Guasu Ñemongeta se alzó con solamente el 2% de los votos del electorado para sus candidatos a la Cámara de Senadores, con lo que ganó solamente un escaño, el cual será ocupado por la actual senadora Esperanza Martínez, reelegida en el cargo con 11.739 votos.
En esa misma línea, el Partido Patria Querida (PPQ) también terminó con un importante debilitamiento, debido a que, con un total de 71.000 votos, solo logró ingresar a un senador. Se trata de Stephan Rasmussen, mientras que quedarían afuera figuras como Fidel Zavala y Nani Arrúa.
Con respecto a Efraín Alegre, ante su tercera derrota al postular para la presidencia, se considera que es el final del camino para el político, quien tras conocer los resultados preliminares finalmente reconoció su derrota y lamentó la falta de unidad de la oposición.
Poderío colorado en el mapa paraguayo
El coloradismo también se impuso con holgura en cuanto a los gobernadores, al conquistar 15 de los 17 departamentos del mapa paraguayo. Solamente en el Departamento Central, así como en Itapúa lograron posicionarse candidatos opositores.
Con respecto a las elecciones del 2018, la oposición había logrado ganar cuatro gobernaciones, entre ellas las de Concepción, Cordillera y Amambay de la mano del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) y la de Caaguazú con la Alianza Ganar.
En Central fue electo el liberal Ricardo Estigarribia, recuperando de esta manera el poderío de la oposición, tras la cuestionada gestión del colorado Hugo Javier González, procesado por millonarias irregularidades al frente de su administración.
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Estigarribia tuvo una gran visibilidad como intendente de la ciudad de Villa Elisa durante la pandemia y se quedó con el 39,90% de los votos (342.716), frente a un cercano 37,46%, que logró el colorado Luis Fernando (321.794 votos).
Mientras tanto, en Itapúa fue electo el ex intendente liberal de Cambyretá Francisco Javier Pereira Rieve, quien se impone como primer gobernador de la alternancia en esa zona del país.
Uno de los departamentos en los que la oposición acostumbra a ganar, de la mano del Partido Libera, es Concepción, donde en estos comicios se dio una mínima diferencia de 28 votos entre la colorada Liz Meza y el liberal Eliseo Guggiari.
Figuras femeninas que resaltan
Finalmente, como uno de los aspectos interesantes a resaltar tras las contiendas electorales es que varias figuras femeninas lograron resaltar sobre todo para el Congreso Nacional.
En ese sentido, la Alianza Encuentro Nacional, liderada por la todavía diputada Kattya González, logró alcanzar cerca de 150.000 en total, convirtiéndose en la cuarta fuerza electoral.
Seguidamente, también se destaca la figura de dos mujeres de izquierda, como la reelecta senadora del Frente Guasu, Esperanza Martínez, y la electa diputada Johanna Ortega. Esta última fue candidata a intendenta de Asunción y en estos últimos comicios logró unos 13.894 votos para ocupar un lugar en la Cámara Baja.
