03 oct. 2025

La edad del padre también influye en la salud del bebé, según estudio

Un análisis basado en datos de nacimientos de la última década en EEUU ha vinculado a los bebés de padres mayores con una variedad de riesgos al nacer, incluyendo un bajo peso y convulsiones.

Bebé torturado.jpg

A casi dos años del caso, el libanés acusado de torturar a niño de un año y cuatro meses, sería sentenciado.

Pixabay.

El estudio de la Universidad de Stanford (California), publicado este miércoles en la revista especializada British Medical Journal, utilizó datos administrados por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en sus siglas en inglés) y el Centro Nacional de Estadísticas de Salud (NCHS, en inglés).

“Tendemos a considerar los factores maternos al evaluar los riesgos de nacimiento asociados, pero este estudio muestra que tener un bebé sano es un deporte de equipo, y la edad del padre también contribuye a la salud del bebé", señaló el autor principal, Michael Eisenberg, de la universidad californiana.

Los datos de 40,5 millones de nacimientos mostraron que los bebés con padres de “edad paterna avanzada”, que aproximadamente equivale a mayores de 35 años, tenían un mayor riesgo de complicaciones, como bajo peso al nacer, convulsiones y necesidad de asistencia de aire al nacimiento.

En general, cuanto mayor es la edad de un padre, mayor es el riesgo: los hombres con 45 años o más tenían un 14% más de probabilidades de tener un hijo prematuro, y los hombres de 50 años o más tenían un 28% más de probabilidades de tener un hijo que requiere ingresar en la unidad de cuidados intensivos.

Aun así, estas cifras no son motivo para cambiar drásticamente ningún plan de vida, ya que los riesgos son “relativamente bajos”, dijo Eisenberg.

Los investigadores organizaron la información basándose en la edad de los padres y en una variedad de parámetros que pueden desviar la asociación entre la edad del padre y los resultados del parto, como son raza, nivel educativo, estado civil, historial de tabaquismo, acceso a la sanidad y edad de la madre.

Los datos sugieren que una vez que un padre llega a la edad de 35 años hay un ligero aumento en los riesgos de nacimiento en general, ya que con cada año que un hombre envejece acumula en promedio dos nuevas mutaciones en el ADN de su esperma.

Para Eisenberg, lo que más sorprendió al equipo fue la relación que se encontró entre la edad paterna avanzada y la posibilidad de que la madre desarrolle diabetes durante el embarazo.

Las parejas de los hombres mayores de 45 años, por ejemplo, fueron un 28% más propensas a desarrollar diabetes gestacional, en comparación con los padres de entre 25 y 34 años.

Más contenido de esta sección
Los glaciares suizos, especialmente sensibles al cambio climático, perdieron una cuarta parte de su volumen en apenas 10 años, según un estudio publicado este miércoles que alerta sobre la velocidad del fenómeno.
El papa León XIV se unirá a expertos en medioambiente y activistas de todo el mundo en una conferencia sobre el clima que se celebra este miércoles cerca de Roma, y en la que participará la estrella de “Terminator”, Arnold Schwarzenegger.
El gobierno argentino confirmó este martes la detención en Perú de Pequeño J, considerado el autor intelectual de un brutal triple crimen la semana pasada que las autoridades sospechan tiene vínculos con el narcotráfico.
Un influencer chino falleció luego de estrellarse con un helicóptero ultraligero que pilotaba. El vuelo estaba siendo transmitido por el fallecido.
El embajador de Colombia en Paraguay, Juan Manuel Corzo, renunció este martes a su cargo por “razones de carácter filosófico y de conciencia”, en medio de una nueva crisis diplomática entre su país y Estados Unidos, tras la revocatoria de visados a varios funcionarios del Gobierno de Gustavo Petro.
Las células de la piel humana pueden utilizarse para producir óvulos potencialmente fecundables, así lo indica una estudio que publica Nature y que ha probado una novedosa técnica, aunque aún es necesaria más investigación para garantizar la seguridad y la eficacia antes de futuras aplicaciones clínicas.