Según lo establecido por la Ley Orgánica Municipal, el informe anual de la ejecución presupuestaria de ingresos y gastos consolidados de las fuentes de financiamiento genuino royalties y Fonacide correspondiente al ejercicio fiscal debe ser presentado en los tres primeros meses del año. Posteriormente, debe someterse a la aprobación o rechazo por parte de la Junta respectiva y al posterior examen de la Contraloría General de la República.
La Junta Municipal, con mayoría colorada, resolvió rechazar la rendición de cuentas de la ejecutiva municipal, el último fin de semana. La intendenta de Mbaracayú había enviado la nota junto con el informe anual el 26 de marzo de 2024, casi al cierre del primer trimestre establecido legalmente para la rendición de cuentas del ejercicio 2023.
Posteriormente, la Comisión Asesora de Legislación, presidida por el concejal Wilberto Blanco, solicitó a la intendencia los documentos respaldatorios en un plazo de 48 horas.
Sin embargo, los documentos llegaron recién el viernes 26 de abril, a las 12:50, excediendo el plazo establecido. Mientras que la Comisión Asesora de Legislación recibió los documentos recién el martes 30 de abril y la sesión extraordinaria para su estudio se llevó a cabo el 3 de mayo último.
Una nota enviada a la comisión por la asesora contable, Mónica López de González, indica que no podría emitir un dictamen sobre los documentos enviados por Algarín debido al corto tiempo disponible para su estudio.
En consecuencia, la sesión de la Comisión Asesora de Legislación solicitó el rechazo de la rendición de cuentas basada en la nota de la contadora, el cual fue aprobado por mayoría en la sesión realizada para tratar el tema, el viernes pasado.
El acta de la decisión tomada por el pleno fue adherida a la puerta de la Secretaría General el sábado último, en presencia de una escribana que labró acta del procedimiento.