El concejal de Caazapá Michel Martínez presentó la propuesta ante la corporación legislativa departamental, atendiendo la situación de vulnerabilidad extrema en que se encuentran los pobladores del asentamiento mencionado.
La declaración de emergencia tendrá una duración de 180 días y regirá en las zonas 1, 2 y 3 de Mandu’arã.
Asimismo, se autorizó la conformación de una comisión especial para la realización de un informe detallado de la situación social y económica en la que actualmente se encuentra el territorio.
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La organización denominada Comedor Ambulante celebró la decisión de la Junta Departamental, señalando que, en consecuencia, se podrán atender las necesidades urgentes del asentamiento, como alimentación, caminos, salud y educación.
Días atrás, Última Hora publicó sobre el cuadro grave de desnutrición de dos niñas indígenas de la zona, lo que conmocionó a pobladores y autoridades.
El caso desnudó el poco interés de los organismos estatales, que deberían velar por la integridad de los indígenas.
