01 jun. 2024

Incautan documentos del clan Insfrán

Una comitiva liderada por el fiscal Irán Suárez allanó una vivienda en la localidad de Remansito, en medio de las incursiones que se realizan en el operativo A Ultranza Py.

El sitio guarda relación con Miguel Ángel Insfrán, uno de los investigados en la megacausa. Este, que es conocido con el alias de Tío Rico, es considerado uno de los líderes de una estructura dedicada al tráfico de drogas y lavado de dinero.

En el sitio allanado los intervinientes encontraron varias carpetas con documentos, que fueron llevadas hasta la sede fiscal en varios vehículos. Se trata de facturas, planillas, recibos y otros documentos de empresas como el Porvenir y otras que están ligados a la familia.

Al parecer, los biblioratos fueron llevados hasta ese lugar cuando comenzaron las incursiones, a mediados del mes de febrero de este año.

De acuerdo a lo informado por fuentes investigativas, los miembros del clan buscaban esconder las carpetas para evitar las pesquisas de los intervinientes.

Sus hermanos, el pastor José y Yolanda, también están en la mira de los investigadores. Los tres se encuentran con paradero desconocido y están siendo buscados por la Policía. Un integrante de la familia, Conrado Insfrán Galeano, es el único que se encuentra detenido.

Las empresas Guaraní Business, El Porvenir SA, Espaguar y otras son los que formarían parte del esquema ilícito.

Se sospecha que los hermanos utilizaban los locales comerciales, así como las iglesias, para lavar dinero sucio proveniente del narcotráfico.

Más contenido de esta sección
Demasiados episodios grotescos en una semana como para no dedicarles unas líneas.
Tras las impactantes revelaciones que se obtuvieron con la operación Dakovo, que logró exponer tan explícitamente los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas, sobrevino una situación por de más escandalosa: la implicación de altos militares en actividades criminales. Esta fue sin dudas una dolorosa comprobación del elevado nivel de infiltración del poder mafioso dentro de las instituciones del Estado paraguayo. Además de ser profundamente vergonzoso, esto implica un ataque a la democracia.
El Congreso Nacional rompió récord esta semana con el proyecto de la ley de superintendencia; los senadores tardaron 15 minutos para aprobar; los diputados 11 minutos. En una convulsionada jornada, los diputados también aprobaron ley que suaviza penas para corruptos y los senadores salvaron al cartista Hernán Rivas, acusado de tener un título falso de abogado. Y como les quedó tiempo, también mutilaron la ley de puerta giratoria. Este es el espantoso combo navideño que el Parlamento le ofrece al pueblo paraguayo.
Los impactantes resultados de la operación Dakovo lograron exponer en forma explícita los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas. En nuestro país, logró la detención de más de una decena de personas involucradas en un esquema de tráfico internacional de armas y una nota gravísima, entre los detenidos están un militar de alto rango así como ex funcionarios de la Dimabel. Es muy preocupante la manera en que la mafia y el crimen organizado están socavando nuestra soberanía y nuestra democracia.
No fabricamos armas, pero las comercializamos en cantidad industrial. No producimos cocaína, pero el país es depósito, ruta y puerto de embarque de cantidades industriales que llegan a los principales mercados del mundo.
Eduardo Nakayama abandona el PLRA. Solo y apresuradamente, dicen. Quién sabe. Explica que no ve ninguna posibilidad de que su partido pueda desprenderse de la infiltración cartista. Desde adentro ya no hay nada que hacer, sostiene.