Los colorados tuvieron que esperar 26 años para poder alzarse con la Gobernación de Central, que durante décadas fue un verdadero bastión liberal; por meses el candidato colorado había liderado la intención de voto.
La diferencia de votos fue reñida entre González y su contrincante liberal, Líder Amarilla, desde el inicio de la Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP). La brecha entre ambos no alcanzaba siquiera el 2%.
Finalmente, con el 98,45% de mesas escrutadas el animador obtuvo 310.276 votos, sobre los 296.618 de Amarilla. Con una diferencia ínfima de 1,94%.
Técnicamente Hugo Javier González no es el primer colorado en convertirse en gobernador de Central, pues Carlos Alberto Saldívar se le adelantó. Saldívar es concejal departamental y va a completar el periodo que le correspondía al liberal Blas Lanzoni, quien se candidató para senador.
Así las cosas, el periodo 2018-2023 tendrá al Partido Colorado administrando el 11º Departamento, con una población de más de dos millones de habitantes y un nivel de pobreza que alcanza el 16%.
Las encuestas no se equivocaron
Las tendencias fueron siempre muy claras. De acuerdo con la encuesta de la empresa First, Hugo Javier González (ANR) se haría con el 52% de los votos y Líder Amarilla (PLRA), con el 25,5%, resaltando una diferencia del 27%.
Otra consulta, la realizada por Grau y Asociados para Última Hora, Monumental y Telefuturo, tenía como resultado un margen menor: 50,2% para Hugo Javier González (ANR) y 38,7% para Líder Amarilla (PLRA).Figura mediática
A sus 51 años, Hugo Javier González Alegre arrastra una larga trayectoria en radio y televisión, conocido como el “Número Dos”, también fue la segunda opción del movimiento cartista Honor Colorado, que en un primer momento promovió la candidatura de otro mediático, Rubén Rodríguez, que no duró ni 48 horas. A diferencia de Rodríguez, Hugo Javier perseveró y logró sacar provecho de su trayectoria.
¿Por qué ganó un colorado en Central?
Para la politóloga Sara Mabel Villalba, politóloga, la derrota de los liberales en el Departamento Central, tras 26 años, se debe principalmente al hartazgo de la población ante la figura de los políticos tradicionales.
“Hugo Javier es una figura mediática desde hace 20 años, tiene una larga carrera haciendo de animador de programas, además, con alto rating; tiene cierto carisma, facilidad de trato con la gente, se muestra cercano y su imagen es la de una persona que surgió de abajo, que trabajó mucho hasta llegar donde está", explica Villalba.
Para la politóloga: “El ciudadano promedio se siente identificado con él y no lo ve como una figura distante, que es el caso de los políticos tradicionales”.
La profesional agrega que Hugo Javier decía las cosas que a la gente le gusta escuchar “y, además, el candidato liberal tiene acusaciones –ciertas o no– de adjudicaciones directas mientras estuvo en la Municipalidad, eso tampoco le favorecía”.Hugo Javier, en primera persona
Hugo Javier González cuenta que, a los 12 años, junto con un vecino y su cajón de lustre a cuestas, trabajaba por todo el microcentro de Asunción. “Nos íbamos frente al Cine Teatro Victoria y en ese lugar lustrábamos los zapatos a los policías de tránsito, estaba donde está el Asunción Súper Centro, y también en el Correo”, recuerda.
Poco después lo convirtieron en ordenanza del Correo y al tiempo lo nombraron funcionario. “Como cartero terminé el básico en el Nacional de la Capital. Me gané mi lugar en ese colegio, donde no se entraba sin tener buenas notas o un buen contacto”, asegura.
Al terminar el nivel básico y como no quería dejar de trabajar mientras estudiaba, se trasladó al correo de Fernando de la Mora, donde siguió trabajando mientras asistía al Colegio Nacional Fernando de la Mora, en el turno noche.
“Así terminé el colegio, y quería egresar también como subteniente de Artillería porque mi meta era tener una estrella como mi papá y servir en los cuarteles. Finalmente, egresé como subteniente y a la par ingresé en Periodismo en la Universidad Nacional de Asunción, y ahí empezó mi carrera”, explica.
“En la escuela yo era el que cantaba y el que recitaba, en el colegio estaba entre los poetas. Después, en el bachillerato era el delegado de curso, el que lo representaba en los festivales intercolegiales, y terminé el colegio ya prácticamente enamorado del escenario y del micrófono. En un principio, iba a estudiar Derecho, pero me decidí por Periodismo por ese amor al escenario”, comenta.
“Yo venía de una muy buena formación, papá era músico, profesor superior de la Banda de Policía, de la Jazz Band, de la Sinfónica, y era director y fundador de la Bandita de San Lorenzo, y en las actuaciones descubrí el cariño por la música y el valor del trabajo”, rememora.
“Hay tres pilares fundamentales que hay que atacar en este país: salud, educación y justicia. El pobre no tiene acceso a la Justicia porque no tiene plata y por la misma razón no tiene acceso a la salud”, dice y asegura que, para él, “la clave está en la honestidad, nosotros no elegimos gente honesta, tenemos que elegir gente nueva, gente fresca y gente que tenga conocimiento de causa”.
Fuente: Entrevista en Ñanduti, junio de 2017.