El ministro de Justicia, Rodrigo Nicora, y el criminólogo Juan Martens debatieron anoche sobre los inconvenientes que existen en las penitenciarías del país. Entre ellos resaltan el negocio interno y la carga exagerada por parte del Poder Judicial.
Martens cuantificó que actualmente la cárcel es un mercado, en donde todo se compra y todo se vende; por ejemplo, citó que una cebolla cuesta G. 1.000 o 2.000, según el lugar donde uno se encuentre.
“Un pabellón puede generar cerca de G. 600 a 700 millones al mes, dependiendo de a quién aloje, porque hay pabellones que no generan absolutamente nada,” detalló.
Refirió seguidamente que una cuestión que se aplicó en otras cárceles es la rotación permanente y el no contacto con la población penitenciaria, que se refiere a la automatización de puertas, de servicios en donde el personal penitenciario no tiene contacto ni conoce a los reclusos.
Al respecto, el ministro mencionó que son procesos que tienen inicio, pero no tienen fin y que existen señales auspiciosas, que son la separación de los cabecillas de organizaciones criminales y la expulsión de altos perfiles internacionales, que se inició con el Operativo Veneratio y continúa con el Operativo Kuarahy’a, que fueron altos perfiles llevados al régimen cerrado.
SUPERPOBLACIÓN. Respecto al hacinamiento en las distintas cárceles, Martens refirió que si no hay un cambio en el Poder Judicial, el problema “seguirá siendo el mismo caos,” y aclaró que ya no es una responsabilidad del ministro Nicora.
“El Poder Judicial hoy está cargando básicamente 1.000, 1.500 personas por año, no hay infraestructura que eso pueda aguantar y tiene que trabajarse de una manera integral: Gobierno, poderes del Estado, Poder Judicial.
Ahondó que hoy se tiene un inconveniente central, el cual se refiere a que es muy fácil ingresar al sistema penitenciario, pero es muy difícil salir, ya que los jueces y las juezas “no se animan a dar libertad, tienen miedo; tendrán sus razones”.
Según un estudio que viene realizando, indicó que el 70% de la ciudadanía paraguaya cree que serán víctimas de delitos en los próximos meses y que el 85% tiene miedo porque ve los hechos en las noticias.
A propósito de la corrupción imperante dentro de las penitenciarías, el ministro Nicora refirió que es una realidad y que realizan varias acciones que apuntan al mismo objetivo.
“Primero, mejorar la calidad del talento humano que tenemos, estamos llamando al quinto grupo de nuevos agentes penitenciarios y dentro de estándares básicos para poder entrar dentro de las tecnicaturas; no nos queda de otra, tenemos que mejorar el capital humano”, apuntó.
El ministro confesó que varios agentes penitenciarios ganan sueldo mínimo y ya existen otros nuevos agentes penitenciarios que cobran G. 3.800.000 y que actualmente se encuentran realizando concursos de oposición pública en cuestión a la selección de personal para las distintas cárceles del país y para mejor transparencia.
CIERRE DEFINITIVO DE LA CARCEL BUEN PASTOR
El ministro de Justicia, Rodrigo Nicora, anunció el cierre definitivo de la cárcel de mujeres Casa del Buen Pastor, luego de 106 años de funcionamiento. El principal centro penitenciario femenino se inauguró en 1919 y albergaba a más de 500 internas. El nuevo centro penitenciario es el Comple, ubicado en la ciudad de Emboscada, que tiene una capacidad para albergar a 1.237 personas privadas de libertad, que están distribuidas en celdas preparadas para cuatro internas, con equipamientos necesarios para el aseo y el descanso de las mujeres.
MOTOBOLT: ANALIZARON ACCIÓN
El caso del conductor motobolt imputado por homicidio doloso, por acabar con la vida de un supuesto ladrón, sigue generando un intenso debate. En esta ocasión fueron los propios abogados del fallecido y del trabajador.
Maglio Villalba, representante del conductor de Moto Bolt, Diego Delgado, imputado por homicidio doloso, sostiene que él, en ningún momento llegó para atacarle y que no hubo esa intención de quitarle la vida a Bruno Acosta.
“Diego ni siquiera pudo despojarse de su mochila, ni de su casco, empezó a retroceder, defendiendo su integridad”, indicó el defensor.
Villalba también refirió que su defendido pudo recuperar su celular supuestamente robado, al momento de reclamar al supuesto cómplice de Bruno, indicándole que el aparato se encontraba bajo la motocicleta de este.
Por su parte, Óscar Sánchez, representante legal de la familia de Bruno Alfredo Acosta Alvarenga (21), refirió que es una situación que se encuadra en homicidio doloso en calidad de autor.
“Partamos de la base de que se ultima a un chico que no tiene antecedentes de nada. La chica mintió ante la Fiscalía y tenemos documentos que respaldan lo que sostenemos; no venimos a decir esto por defender la vida de alguien”, indicó.
El abogado aseguró que la joven mantuvo conversaciones previas con Diego Delgado.
“Queremos entender que hasta incluso ella pudo haber sido cómplice de un asesinato, un ajusticiamiento”, refirió Sánchez.