En tiempo récord, las empresas que usan harina para la fabricación de alimentos se articularon para pronunciar su preocupación por la sigilosa liberación comercial del trigo HB4. Son más de 30 firmas que agrupan a más de 70 trabajadores.
Tomando la referencia de artículos científicos y de las universidades, sostienen que este evento biotecnológico trae consigo un paquete que incluye glufosinato de amonio, un herbicida que es 15 veces más dañino que el glifosato, que ya está instalado en el país desde hace décadas. Además, de su impacto a la biodiversidad supone la exposición de la población al consumo diario del químico, lo que preocupa al sector en su condición de fabricante de alimentos a base de este cereal, según específica la carta que publicaron a través de las redes sociales.
A esto se suma la contaminación genética inminente de los cultivos no transgénicos a través de la polinización. Al respecto Ignacio Fontclara, de la panadería y casa de comidas Karú, dijo que en su caso utiliza incluso harina orgánica y que su acceso será aún más complicado si el trigo HB4 entra a los campos.
En articulación con otros empresarios, presentará la misma carta en el MAG, donde espera que además se abra una mesa con las autoridades para conversar sobre la preocupación que se instaló en los locales gastronómicos.
Investigación. El ministro de Agricultura y Ganadería, Santiago Bertoni, negó que el evento IND-ØØ412-7 implique la incorporación del glufosinato de amonio.
Sobre este punto, la investigadora de BASE IS, Lis García, dijo que se trata de una falacia o de un desconocimiento de parte del secretario de Estado, teniendo en cuenta que esta biotecnología es tolerante a dicho herbicida y por tanto su paquete de cultivo viene con ese agroquímico.