La agente había requerido la pena de 15 años de prisión, pero los jueces, invocando el artículo 400 del Código Procesal Penal, se apartaron del pedido del Ministerio Público y le dieron 30 años de encierro al acusado.
La representante de la sociedad señaló que se probaron los hechos, que fue Eusebio Torres el que tomaba las declaraciones, dirigía las torturas, además de que también torturó a las víctimas.
Indicó que el acusado, por la edad, tendrá arresto domiciliario hasta quedar firme la resolución dictada ayer por el Tribunal de Sentencia que atendió la causa.
Indicó que fue un trabajo de varios agentes fiscales y que, tras mucho tiempo, llegaron a la etapa de juicio oral, donde lograron una condena en contra del acusado.
Al iniciar el juicio oral ayer, la fiscala sostuvo que los documentos señalaban que cuando Eusebio Torres estaba para ascender a comisario, la ficha decía que prestaba servicios en el Departamento de Investigaciones de la Policía de la Capital.
Es que la defensa se apoyó en el legajo policial, donde decía que recién en 1978 Torres fue comisionado al Departamento de Investigaciones hasta el año 1980, en que fue trasladado a Luque.
Sin embargo, los magistrados le dieron más valor probatorio a las declaraciones contestes de los testigos y no al documento señalado por la defensa.