El enfrentamiento entre policías y labriegos se registró en la mañana de este miércoles en la zona de la colonia 3 de Noviembre, Repatriación, Caaguazú, al costado de una propiedad de 20.000 hectáreas, perteneciente a colonos menonitas.
Los incidentes iniciaron, supuestamente, debido a que se intentó quemar una máquina cosechadora de la propiedad, informó el corresponsal de Última Hora Robert Figueredo.
De acuerdo con el informe, los labriegos impidieron que los productores realicen sus tareas de cosecha de soja y ante esa situación, los uniformados reaccionaron en el lugar para restablecer el orden.
Asimismo, los agentes intervinientes comenzaron a recibir por parte de los labriegos disparados con honditas, momento en el que fue herido en el ojo el suboficial Antonio Agüero.
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El efectivo fue derivado a la Clínica Luz Esperanza de Campo 9 y no perderá la visión, según manifestó el comisario principal Óscar Pedrozo.
Esta situación provocó la utilización de balines de gomas y gas lacrimógeno por parte de los efectivos policiales para dispersar a las personas, que desde hace unos días abandonaron las 20.000 hectáreas y se ubicaron a un costado de la propiedad.
Según la denuncia de los colonos, los labriegos también realizaron la toma de un camión con cargamento de soja, cuyo conductor fue obligado a derramar los granos en el camino.
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El despliegue policial en la zona se realizó mientras se esperaba una decisión judicial sobre el conflicto por la propiedad, que pacíficamente fue desocupada el martes de la semana pasada y sigue siendo reclamada por los labriegos.
Las tierras, que están mecanizadas, pertenecen a unos 100 menonitas que residen en la localidad de J. Eulogio Estigarribia (también conocido como Campo 9).
El conflicto data de hace un par de años, pero las familias campesinas decidieron ocupar el predio en agosto del 2019 como medida de fuerza. Sin embargo, en octubre hubo un fuerte operativo policial, con un despliegue de 1.500 efectivos para el desalojo.
Tras el enfrentamiento se levantaron varias evidencias del lugar por personal de criminalística de la Policía Nacional. Los labriegos dejaron tres bombas tipo cóctel y varias balitas de cristal con los cuales, presumiblemente, tenían la intención de dañar los implementos agrícolas y tractores de los colonos.