27 abr. 2024

“El sistema electoral paraguayo está hoy en el banquillo de acusados”

El parlamentario uruguayo Rafael Michelini estuvo en Paraguay por un seminario, y aprovechó la ocasión para analizar la situación que vive el país, lamentando las denuncias que pesan actualmente sobre el Tribunal Superior de Justicia Electoral.

Crítico.  Rafael Michelini alentó a los paraguayos a reformar el cuestionado sistema electoral.

Crítico. Rafael Michelini alentó a los paraguayos a reformar el cuestionado sistema electoral.

El legislador uruguayo Rafael Michelini, hijo del reconocido periodista y político Zelmar Michelini (asesinado durante la dictadura militar argentina, en mayo de 1976), visitó Paraguay la semana pasada, en el marco del seminario Partidos Políticos y Reforma Electoral, hacia una mayor y mejor representación, donde habló de la experiencia uruguaya y las propuestas de solución para nuestro país. Representante del gobernante Frente Amplio en Uruguay, Michelini analizó la situación institucional paraguaya, y opinó sobre las denuncias de fraude que sacuden a la Justicia Electoral, expresando que salpican a todas las instituciones de todo el país.

–En Paraguay, la oposición denunció fraude electoral en las pasadas elecciones y la polémica sigue con el caso de un funcionario del TJSE negociando carga de votos. ¿Cómo se ve esta situación desde Uruguay?

–No desde Uruguay, desde todo el mundo. No se la ve bien, no es buena imagen para Paraguay. Y además esa debilidad institucional, o esa fragilidad institucional, enseguida pone en la misma bolsa a la justicia, y a otros organismos del Estado, donde las cosas no ocurren como tienen que ocurrir, y no van por el camino correcto, sino que están al libre albedrío del partido más poderoso. Y eso, repito, en un mundo que cada vez es más exigente, a nivel de la comunidad internacional, donde las inversiones de calidad muestran a países serios que tienen resueltas estas cosas, resueltas de la buena forma, y no en manto de sospechas de opacidad, donde el conjunto de los paraguayos o los extranjeros dicen, levantando los hombros: “Bueno, es Paraguay”. Eso no es bueno para la imagen de un país tan joven, tan potente, con tantas posibilidades, que se está haciendo un lugar bien interesante en América del Sur.

–¿Qué opina del sistema electoral paraguayo?

–Creo que el sistema electoral paraguayo está cuestionado, e independientemente de los detalles, virtudes y defectos que tenga, cuando un sistema está cuestionado tiene que ser revisado por los propios paraguayos. Porque si un sistema tiene opacidad no genera la legitimidad de origen, y si en los años posteriores a una elección hay una cierta idea que la soberanía del pueblo no fue respetada, no solo pone en tela de juicio la institución electoral, sino el resto de las instituciones. Los países serios tienen sistemas electorales transparentes, auditables y no cuestionables. Y si bien algunos países, que pudiéramos decir serios, tienen a veces algún traspié, se los ve como excepción y no como regla. La credibilidad de las instituciones de un país, las inversiones de calidad, se miden en un porcentaje muy alto sobre cómo es el sistema electoral, si es creíble o no es creíble, si refleja la voluntad del pueblo o no. Y la sensación que hay es que hoy el sistema (electoral) paraguayo, para los de adentro y para los de afuera, está en el banquillo de los acusados.

–¿Qué piensa de la incorporación de la tecnología en las elecciones?

–Son decisiones que tienen que tomar ustedes. Todo lo que sea para generar transparencia va en la buena dirección. La tecnología no es la solución de todo, pero puede ayudar si hay un pacto, un consenso muy fuerte de en qué cosas se puede avanzar. Por ejemplo, para que no se repitan los votantes: la huella digital puede ayudar a que los que estén en el padrón sean los que están votando, y no otros.

–¿Cómo se incentiva la participación en las elecciones?

–Eso es parte del programa, del activo que tienen que cultivar los candidatos. Y parte de los desafíos históricos que en una coyuntura concreta tenga cada país. Pero también en esto incursiona que haya encuestas confiables, porque muchas veces se presentan encuestas donde hay tal diferencia entre el primero y el segundo, que la gente las da por resueltas y los que pueden estar votando por la segunda opción, bueno, si ya está perdido, no van a votar.

–¿Es propicio regular las encuestas?

–Depende de cómo es la Constitución, depende de las regulaciones que puedan tener. Pero también hay una reputación de las empresas; si cualquier empresa dice que hace encuestas, y dice cualquier cosa, bien valdría a los paraguayos no contratar a esas empresas.

–Por otro lado, ¿cómo se controla el financiamiento político?

–Primero, hay que hacer una ley que involucre a todos los partidos, aunque no sea demasiado exigente, y periodo tras periodo irla corrigiendo, adecuando, y volviéndola más exigente. En Uruguay, terminado el gobierno instalamos siempre una comisión que revisa la Ley de financiamiento y le hace retoques en algunos casos, o modificaciones importantes, en otros. Entonces, tenemos reglas, no nuevas, son las mismas reglas, pero más exigentes para cada elección.

–¿Se necesita un pacto político entonces?

–Sí. El pacto político es imprescindible. No hay prosperidad, no hay modernidad, no hay un Uruguay o un Paraguay modernos, y no hay inversión de calidad, si no se acepta que (un ganador) ganó legítimamente, ganó en buena ley, haciendo las cosas como deben ser, y no amañando o generando opacidad en la voluntad del elector.

Más contenido de esta sección
Las ventas al público en los comercios pyme de Argentina cayeron un 25,5% interanual en febrero pasado, golpeadas por la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores a causa de la elevadísima inflación, y acumulan un declive del 27% en el primer bimestre del año, según un informe sectorial difundido este domingo.
El mandatario decidió crear el fondo nacional de alimentación escolar esperando un apoyo total, pues quién se animaría a rechazar un plato de comida para el 100% de los niños escolarizados en el país durante todo el año.
Un gran alivio produjo en los usuarios la noticia de la rescisión del contrato con la empresa Parxin y que inmediatamente se iniciaría el proceso de término de la concesión del estacionamiento tarifado en la ciudad de Asunción. La suspensión no debe ser un elemento de distracción, que nos lleve a olvidar la vergonzosa improvisación con la que se administra la capital; así como tampoco el hecho de que la administración municipal carece de un plan para resolver el tránsito y para dar alternativas de movilidad para la ciudadanía.
Sin educación no habrá un Paraguay con desarrollo, bienestar e igualdad. Por esto, cuando se reclama y exige transparencia absoluta en la gestión de los recursos para la educación, como es el caso de los fondos que provienen de la compensación por la cesión de energía de Itaipú, se trata de una legítima preocupación. Después de más de una década los resultados de la administración del Fonacide son negativos, así como también resalta en esta línea la falta de confianza de la ciudadanía respecto a la gestión de los millonarios recursos.
En el Paraguay, pareciera que los tribunales de sentencia tienen prohibido absolver a los acusados, por lo menos en algunos casos mediáticos. Y, si acaso algunos jueces tienen la osadía de hacerlo, la misma Corte Suprema los manda al frezzer, sacándolos de los juicios más sonados.
Con la impunidad de siempre, de toda la vida, el senador colorado en situación de retiro, Kalé Galaverna dijo el otro día: “Si los políticos no conseguimos cargos para familiares o amigos, somos considerados inútiles. En mi vida política, he conseguido unos cinco mil a seis mil cargos en el Estado...”. El político había justificado así la cuestión del nepotismo, el tema del momento.