El analista económico Amílcar Ferreira, durante una entrevista con Radio 780 AM, explicó los efectos que tiene la tendencia a la baja del dólar en la economía paraguaya, tanto en el ámbito público como en el sector privado.
Ayer el dólar mostró un leve repunte, alcanzando G. 7.090, tras ubicarse entre G. 7.050 y G. 7.060 al inicio de la semana.
Ferreira sostuvo que la depreciación de la moneda estadounidense favorece al Estado paraguayo, ya que facilita el pago de la deuda externa y reduce los costos de las obras públicas que dependen de insumos importados.
“Al Estado le favorece porque parte mayoritaria de la deuda está denominada en dólares y, sin embargo, la recaudación de impuestos es en guaraníes. Entonces, el Estado tiene mayor capacidad de pago de la deuda”, explicó.
Agregó que también abarata proyectos públicos, especialmente en el área de infraestructura.
“Todo lo que son obras públicas que se realizan con insumos importados, por ejemplo, las rutas, el asfalto, al tener un dólar más barato favorece, porque hace que salgan un poco más baratas en guaraníes”, apuntó.
Ferreira indicó que la variación del tipo de cambio genera un balance entre ganadores y perdedores.
“El gran ganador sería el sector importador, porque puede comprar con los guaraníes mayor cantidad de dólares. También salen ganando los consumidores que compran productos importados, y el perdedor sería el sector exportador”, detalló.
El economista recordó que el primer semestre suele beneficiar a los exportadores, por el ingreso de divisas de la cosecha de soja, mientras que el segundo semestre es más favorable para los importadores, debido a la reposición de inventarios y el aumento de compras previas a fin de año.
Respecto al contexto internacional, Ferreira explicó que el dólar se ha devaluado alrededor del 10% frente a otras monedas debido a la guerra comercial iniciada por la administración de Donald Trump.
“Muchos países están diversificando sus reservas a otros instrumentos no denominados en dólares, como el oro, el euro o las criptomonedas. Esta menor demanda por instrumentos en dólares ha hecho que su valor bajara, como cualquier otro bien cuyo precio depende de la oferta y la demanda”, señaló.
Finalmente, advirtió que el panorama global sigue siendo incierto: “Es difícil predecir qué va a pasar. Si la administración Trump llega a un acuerdo con China, tendríamos un dólar fortalecido. Pero si persisten las tensiones, seguiremos con un dólar débil”, concluyó Ferreira.