La industria frigorífica local está implementando una maniobra que apunta a forzar la disminución del precio del ganado, sin justificación en las condiciones actuales del mercado, advirtió Ramiro Maluff, presidente de la Asociación Paraguaya de Productores y Exportadores de Carne (Appec).
Según explicó, las plantas están comprando hacienda para varios días, pero mantienen un ritmo de faena reducido con el objetivo de presionar los valores a la baja.
“Las industrias salieron con una propuesta de precios hacia abajo sin ninguna razón. Están especulando, tienen hacienda comprada para muchos días, pero faenan muy poco. Eso demuestra una intención clara de no aumentar la faena para bajar el precio al productor”, afirmó Maluff en conversación con Última Hora.
El titular de la Appec aseguró que esta práctica no solo afecta a los ganaderos, sino que también repercute en el mercado interno. “Por la disminución de faena hay menos costillas en las carnicerías, lo que termina perjudicando al consumidor local”, explicó.
Contexto favorable. Maluff sostuvo que el contexto internacional es favorable y que no existen motivos económicos para una reducción del precio. “El mercado internacional está muy demandante. Israel, por ejemplo, cerró negocios a USD 7.500 la tonelada. No hay ninguna razón para bajar los precios cuando afuera se paga más”, señaló.
En ese sentido, denunció que la industria se aprovecha de la imposibilidad de exportar ganado en pie. “Saben que ese ganado necesariamente va a terminar en sus plantas, y usan eso como ventaja para pagar menos al productor”, añadió.
El dirigente advirtió que este tipo de políticas pone en riesgo la sostenibilidad del sector. “Con estrategias como esta se desestimula al productor y se termina reduciendo el rebaño nacional. Es una situación que perjudica al país y, a largo plazo, también a las propias industrias”, alertó.
Actualmente, el precio del ganado se redujo de USD 4,80 a 4,30 por kilo, pese a que los precios internacionales de la carne se mantienen en ascenso y podrían alcanzar los USD 5 por kilo hacia fin de año, según estimó Maluff.
Menos hato. Al mismo tiempo, el productor ganadero adujo que esta intención de las industrias frigoríficas locales de reducir los precios del ganado afectaría el proceso de recomposición del hato ganadero, que ya sufrió una caída de unas 600.000 cabezas entre 2024 y 2025.
“El productor está haciendo un gran esfuerzo por recomponer el hato ganadero. Si se vuelven a bajar los precios, tendremos otra caída de unas 300.000 cabezas el año que viene. Solo podríamos empezar a recuperarnos a partir del 2027”, sostuvo.
Añadió que Paraguay sigue siendo un consumidor importante de carne bovina, sobre todo con hueso, que en su mayoría queda en el mercado local. Este año, el país ya importó alrededor de 11.000 toneladas de carne, principalmente con hueso, para cubrir la demanda interna.