09 may. 2024

Creíbles e independientes desde hace 45 años

El diario Última Hora cumple hoy 45 años de escribir cotidianamente la historia. Gran parte del trabajo apunta a poner en evidencia los hechos de injusticia y corrupción que contaminan a la función pública, aportando a la transparencia sobre el ejercicio del poder. Estamos convencidos de que esta es la mejor contribución para consolidar la democracia como un sistema de vida, profundizando los valores de la República, colaborando a erradicar la cultura autoritaria que ha marcado profundamente la conciencia como nación. Lo vamos a seguir haciendo desde todas las plataformas periodísticas, y con un objetivo irrevocable: ser creíbles e independientes.

En la prolífica aunque accidentada historia del periodismo de nuestro país, desde la aparición del legendario El Paraguayo Independiente, editado y dirigido desde 1845 por el propio primer presidente constitucional de la República, Carlos Antonio López, se han publicado cientos de títulos de la prensa escrita, pero han sido contados con los dedos de las manos los que han podido sostenerse y sobrevivir en el tiempo, y, por sobre todo, fijarse en el corazón, en la estima y en la confianza de la gente.

Son muchos los nombres de diarios, semanarios o revistas que probablemente sean evocados si hacemos el recuento de más de dos siglos de historia republicana, pero no deja de ser gratificante que a la hora de citar a los medios que han marcado los acontecimientos del país en estas últimas décadas, mucha gente mencione con consideración y estima al diario Última Hora.

Hoy cumplimos 45 años de vida periodística. Desde que este diario salió por primera vez a la calle como un modesto vespertino de dieciséis páginas, el 8 de octubre de 1973, hemos entendido al ejercicio del periodismo como una forma de servir a la gente.

Desde entonces venimos cumpliendo el principio que nos trazaron los directivos fundadores, junto a los primeros periodistas y trabajadores de este medio: acercar información oportuna y veraz a la ciudadanía, a fin de que pueda formarse un criterio cada vez más acertado sobre la realidad política, económica y social.

Gran parte de nuestro trabajo apunta a poner en evidencia los hechos de injusticia y corrupción que contaminan a la función pública, aportando a la transparencia sobre el ejercicio del poder en sus diversos niveles. Estamos convencidos de que esta es nuestra mejor contribución para consolidar la democracia como un sistema de vida, profundizando los valores de la República y colaborando a erradicar la cultura autoritaria que ha marcado profundamente nuestra conciencia como nación.

Lo hicimos en 1973, lo seguimos haciendo hoy, desde las páginas del papel hasta las renovadas plataformas digitales, sabiendo que pueden cambiar las formas de llegar a la gente, pero la esencia del periodismo sigue siendo la misma: ser contralores del poder, comunicar lo que nos emociona, investigar y denunciar lo que está mal y debe ser corregido, defender los derechos amenazados, ofrecer servicios, construir puentes y tender abrazos para seguir trabajando juntos por un mejor país.

Hoy cumplimos 45 años. Sabemos que nuestro mayor capital es la credibilidad y la independencia como medio periodístico, y ese es un capital que queremos seguir cuidando con el apoyo de los lectores, de los anunciantes y de los muchos amigos y amigas que son parte de lo que hacemos cada día. ¡Gracias por acompañarnos!

Más contenido de esta sección
Demasiados episodios grotescos en una semana como para no dedicarles unas líneas.
Tras las impactantes revelaciones que se obtuvieron con la operación Dakovo, que logró exponer tan explícitamente los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas, sobrevino una situación por de más escandalosa: la implicación de altos militares en actividades criminales. Esta fue sin dudas una dolorosa comprobación del elevado nivel de infiltración del poder mafioso dentro de las instituciones del Estado paraguayo. Además de ser profundamente vergonzoso, esto implica un ataque a la democracia.
El Congreso Nacional rompió récord esta semana con el proyecto de la ley de superintendencia; los senadores tardaron 15 minutos para aprobar; los diputados 11 minutos. En una convulsionada jornada, los diputados también aprobaron ley que suaviza penas para corruptos y los senadores salvaron al cartista Hernán Rivas, acusado de tener un título falso de abogado. Y como les quedó tiempo, también mutilaron la ley de puerta giratoria. Este es el espantoso combo navideño que el Parlamento le ofrece al pueblo paraguayo.
Los impactantes resultados de la operación Dakovo lograron exponer en forma explícita los alcances del crimen organizado en cuanto al tráfico de armas. En nuestro país, logró la detención de más de una decena de personas involucradas en un esquema de tráfico internacional de armas y una nota gravísima, entre los detenidos están un militar de alto rango así como ex funcionarios de la Dimabel. Es muy preocupante la manera en que la mafia y el crimen organizado están socavando nuestra soberanía y nuestra democracia.
No fabricamos armas, pero las comercializamos en cantidad industrial. No producimos cocaína, pero el país es depósito, ruta y puerto de embarque de cantidades industriales que llegan a los principales mercados del mundo.
Eduardo Nakayama abandona el PLRA. Solo y apresuradamente, dicen. Quién sabe. Explica que no ve ninguna posibilidad de que su partido pueda desprenderse de la infiltración cartista. Desde adentro ya no hay nada que hacer, sostiene.