Las tierras están ubicadas en la frontera con Bolivia, entre la localidad de Pozo Hondo e Infante Rivarola, Chaco.
El intendente de la Comuna chaqueña, Elmer Vogt, explicó que realizaron un ordenamiento catastral de la zona- desde que asumió el cargo en 2015- y pudieron registrar las tierras gracias a una denuncia ciudadana.
Indicó que, de acuerdo a los registros, en el 2003 la Municipalidad realizó los trámites correspondientes para comprar la propiedad que entonces pertenecía al Instituto Nacional de Desarrollo y de la Tierra (Indert), pero los gobiernos municipales anteriores no culminaron la gestión.
Según la aclaración de Vogt, a raíz de que no se reclamaron las tierras, otra persona ocupó hace tres años el lugar; pero con la reanudación de los procesos administrativos a través del Indert, la Comuna logró recuperar las hectáreas.
El jefe comunal explicó que las tierras serán destinadas al desarrollo de una comunidad rural y urbana en el Chaco.
Agregó que se trabaja en una ordenanza que fijará la cantidad de tierras por persona, sistema de pagos, adquisición, entre otros; que darán a conocer en las próximas semanas a la población.
“Vamos a destinar las tierras a los jóvenes, para que puedan trabajar en la agricultura, horticultura o ganadería”, dijo el intendente a Última Hora.
Finalmente, añadió que el precio por hectárea que se maneja en la zona es de G. 2 millones.