El ex intendente municipal, Rubén Rojas, afirmó a un medio radial de Hernandarias que la Comuna recaudaba un promedio de G. 27 mil millones anuales, mientras que el actual intendente Nelson Cano llegó a solo a unos G. 20 mil millones, fuera de los fondos de Fonacide y Royalties.
En ese contexto, se van acumulando las deudas de la Municipalidad de Hernandarias, sumado a las correspondientes a los juicios iniciados por ex funcionarios, quienes tienen embargado tierras de dominio municipal, de uso privado.
El abogado Raúl Manizares afirmó que el monto aproximado es de unos G. 2 mil millones de la deuda a los ex funcionarios, que habían sido dimitidos en administraciones anteriores como el del fallecido ex intendente Mario Castillo y el anterior que es Rubén Rojas.
“Son unos 30 a 40 funcionarios de la era Castillo y otros 30 aproximadamente de la administración de Rojas”, afirmó ayer el abogado, quien refirió que llegó hasta el embargo y no lo ejecutó porque podría derivar en un problema social, teniendo en cuenta que corresponden a 2 barrios, lo embargado. La deuda inicial fue de unos G. 4 mil millones, en concepto de indemnizaciones, que fueron cubiertos en parte.
El atraso en pago de salarios fue visualizado por la concejala Nilda Venialgo. Esta refirió que se llegó a un atraso de hasta 6 meses, pero que actualmente son 4 meses falta de pago de salario a funcionarios y 2 meses de dieta a los concejales. Ahora estaría amenazando con echar a unos 200 funcionarios, como una solución a los problemas con los funcionarios.
Recordemos que la concejal Venialgo ya había presentado una denuncia por lesión de confianza y varios otros delitos contra el intendente Nelson Cano, por la adquisición de un inmueble por más de G. 3.600 mil millones, que sería en la mayor parte terreno municipal. A más de un año, no hay imputación, y se desconoce qué pasó del caso.
Para el efecto se había adquirido un millonario préstamo bancario. Sobre el punto, el ex intendente Rubén Rojas señaló a un medio radial la semana pasada que lo que se necesitaba añadir a un polideportivo en construcción era apenas 4 metros dentro de la propiedad privada de una institución religiosa y que la oferta fue de 100 millones de guaraníes.
Dijo que se autorizó todo y que la compra no se pudo hacer porque el título de propiedad del inmueble estaba mal. Luego de corregirse, hubo problemas entre los miembros de la Iglesia y se frustró la compra. Sin embargo, bajo la administración de Cano se realizó un préstamo millonario para pagar más de G. 3.600 millones por el inmueble, que en gran parte sería terreno municipal.
La Junta Municipal tuvo que anular una ampliación presupuestaria del año 2024, que incluía un préstamo de 1.500 millones de guaraníes que fue rechazado, por el millonario endeudamiento de la institución comunal por los casos mencionados. El intendente Cano había asumido como representante de un movimiento independiente, pero luego pasó a las filas de Honor Colorado un tiempo después de asumir al cargo.