El doctor Felipe González, director de la institución, mencionó que estas situaciones se dan generalmente por el descuido de los padres.
“Se han extraído monedas, incluso clavos. De todo lo que uno pueda imaginarse los niños llevan a la boca en un descuido. Veo que los padres cada día son más adolescentes. Realmente hay muy poco cuidado de los niños, que siendo pequeños exploran todo”, enfatizó.
Procedimiento. González explicó que se realizan dos procedimientos. Uno es con anestesia general, luego se introduce un tubo rígido y con catéter guía se llega hasta donde está el cuerpo extraño. Para extraerlo se utiliza una pinza. En caso de que no funcione este procedimiento se procede a la intervención quirúrgica, si el objeto está alojado en un bronquio vital.
El titular del Ineram mencionó que además de la institución, otro centro de referencia para tratar estos casos es el Hospital de Clínicas.
Recomendó a los padres que si ven que su hijo ha metido a la boca un objeto extraño, no deben golpearle la espalda, sino llevarlo a un nosocomio. “Al golpear la espalda solo estarán empujando más hacia adentro el objeto”.