GINEBRA
La Comisión Internacional Independiente de Investigación de la ONU, que no habla en nombre de Naciones Unidas, afirma que “se está produciendo un genocidio en Gaza”, dijo a AFP Navi Pillay, jefa de la comisión.
“La responsabilidad recae en el Estado de Israel”, subrayó Pillay, de 83 años, al presentar el documento.
El Ministerio de Exteriores israelí no tardó en reaccionar y rechazó “categóricamente este informe sesgado y mentiroso”, pidiendo incluso la disolución de la comisión investigadora.
La Cancillería estimó además que el reporte “se basa por completo en las falsedades de Hamás, blanqueadas y repetidas por otros”.
Chris Sidoti, uno de los tres comisionados responsables del informe, rechazó en rueda de prensa los comentarios israelíes e insinuó que parecían sacados de ChatGPT: “Siempre dicen lo mismo” y “nunca aportan pruebas”, estimó.
Por primera vez, una comisión de investigación acusa a Israel de genocidio en Gaza, un término que Naciones Unidas no ha empleado aún. No obstante, para Pillay, este reporte debería “incitar a los altos dirigentes de la ONU” a hacerlo.
En ese sentido, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, manifestó tras la publicación que veía “pruebas cada vez más evidentes” de un genocidio en el enclave, devastado por la ofensiva israelí en represalia al ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023 en Israel.
La comisión independiente de investigación concluyó que, desde octubre de 2023, las autoridades y fuerzas israelíes cometieron “cuatro de los cinco actos genocidas” enumerados en la Convención sobre el Genocidio de 1948.
Estos incluyen “matar a miembros del grupo, causar daños físicos o mentales graves a miembros del grupo, someter deliberadamente al grupo a condiciones de vida calculadas para provocar su destrucción física, total o parcial, e imponer medidas destinadas a impedir los nacimientos dentro del grupo”.
El informe concluye que el presidente israelí, Isaac Herzog, el primer ministro Benjamin Netanyahu y el ex ministro de Defensa Yoav Gallant “incitaron a cometer un genocidio y que las autoridades israelíes no tomaron medidas contra ellos para castigar esta incitación”.
“La población israelí ha sido traicionada por su Gobierno (...), que lleva dos años librando esta guerra genocida”, afirmó Sidoti.
A su juicio, “el trauma” del 7 de octubre fue “manipulado por Netanyahu y sus secuaces”.
Casi 65.000 personas han muerto en Gaza desde que comenzó la guerra, según cifras del Ministerio de Salud de Gaza, controlado por Hamás y que la ONU considera fiables. El ataque de los islamistas en Israel dejó por su lado más de 1.200 muertos.
La gran mayoría de los gazatíes tuvieron que abandonar sus hogares al menos una vez, y se están produciendo más desplazamientos masivos a medida que Israel intensifica su ofensiva para tomar el control de Ciudad de Gaza, donde la ONU ha declarado una hambruna.
La comisión investigadora no es una instancia jurídica, pero sus informes son susceptibles de alimentar la presión diplomática, y sirven para recoger pruebas útiles para los tribunales.