Una noche de mucha violencia se vivió nuevamente el martes en Concepción, donde cientos de manifestantes indignados contra la admiración municipal de Alejandro Urbieta, fueron reprimidos y algunos de ellos aprehendidos por la Policía.
La movilización se caracterizó por la presencia de funcionarios municipales y seguidores del intendente Alejandro Urbieta, quienes montaron una fuerte barrera en la cercanía de un negocio local perteneciente a la familia Urbieta.
La reacción de los uniformados comenzó cuando supuestamente jóvenes que estaban en el sector de los indignados explotaron petardos de estruendo a muy baja altura hacia los uniformados y los antiescrachadores.
Los uniformados activaron el carro hidrante, tiraron gases lacrimógenos y disparos con balines de goma. Hubo personas golpeadas.