A través de sendos decretos, el mandatario brasileño estableció cambios en la dirección de la Itaipú Binacional, margen izquierda. Primeramente dio por finalizadas las funciones de Marcos Stamm y Mario Antonio Cecato, como directores general e interino, respectivamente. Posteriormente designó a Joaquim Silva e Luna para el máximo cargo hasta el 16 de mayo de 2022. En reemplazo de Cecato nombró a Anatalicio Risden Junior, vicealmirante.
Silva e Luna nació el 29 de diciembre de 1949 (69 años) y se había convertido en el primer militar brasileño al frente del Ministerio de Defensa, durante la presidencia de Michel Temer. Es oficial de carrera, inició su travesía en el sector castrense en 1969 en la Academia Militar das Agulhas Negras (principal instituto de formación de combatientes) y se graduó como aspirante de Ingeniería en 1972. Fue ascendiendo y llegó a comandar el Estado Mayor del Ejército. Posteriormente fue enviado a la reserva.
Años atrás, ya había venido a Paraguay para liderar una misión brasileña de instrucción, según indican los portales del país vecino. El general de Ejército es especialista en combate urbano y en la selva. Ahora tendrá que discutir con las autoridades paraguayas las condiciones de renegociación del Anexo C del Tratado de la hidroeléctrica. Si bien las conversaciones deben iniciarse oficialmente en el 2023 (cuando el documento cumpla 50 años y se cancele la deuda con Eletrobras), ambos países ya manifestaron el deseo de adelantar las reuniones.
QUIERE PAGAR MENOS. El Gobierno de Bolsonaro ya encomendó revisar los costos de Brasil en la Itaipú, empezando por la modalidad de contratación de potencia. Asimismo, ordenó volver a analizar el pago por cesión de energía a favor de Paraguay. De acuerdo con una reciente publicación del medio Estadão, la transferencia por cesión al Tesoro paraguayo se trata de una asimetría que debe ser revisada y es una de las prioridades del presidente brasileño. Las autoridades vecinas cuestionan que los paraguayos han tenido una ventajosa energía barata durante años, mientras que el Brasil tenía que asumir los costos más elevados. Por tal motivo se radicaron muchas inversiones en tierras paraguayas, inclusive las propias industrias brasileñas han emigrado, enfatizaron.
Vale recordar que, hasta el 2009, el Tesoro brasileño solo pagaba USD 3 por el megavatio hora (MWh) de la energía que nuestro país le cedía. Tras el acuerdo firmado entre los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Fernando Lugo, esa cifra aumentó a USD 9, lo que da un ingreso anual de USD 360 millones, recursos que hoy son destinados al Fonacide.
Otro punto de gran discusión será qué hacer con la tarifa de venta de Itaipú en el 2023. Si se mantiene como está actualmente, se podrían generar unos ingresos adicionales de USD 2.000 millones (USD 1.000 millones) para cada país.
No obstante, los brasileños ya indicaron que buscarán reducir el precio de venta, dado que les resulta más conveniente por sus altos costos.
ANDE y Eletrobras se dan tregua
Tras varios días de impasse, la ANDE y Eletrobras acordaron tomarse 90 días para encontrar una solución en la contratación de potencia de la Itaipú, según informó ayer Pedro Ferreira, presidente de la empresa pública. Los brasileños estaban exigiendo que la ANDE adquiera una mayor proporción de energía garantizada (más cara) y menos superior a la garantizada o adicional (más barata), algo que las autoridades locales rechazaron por el mayor costo que representaría.“Hemos mantenido una conversación con Eletrobras. En este sentido, y ante la situación que se arrastra desde el 2008, en donde se vienen firmando compromisos contractuales en forma mensual, hemos coincidido en la importancia de volver a acordar contratos anuales en los términos señalados en el Tratado, lo cual da una mayor previsibilidad al funcionamiento de la Itaipú”, precisó Ferreira.Añadió que, respetando los acuerdos vigentes, se ha definido un plazo de tres meses para definir los términos del mencionado contrato anual. En este periodo, los montos de potencia contratada informadas por la ANDE serán respetados por Brasil, y se propondrá a Itaipú la aplicación de procedimientos provisorios de facturación, de forma a garantizarle a la Binacional los recursos económicos suficientes, enfatizó Ferreira.