“La situación está muy compleja, ya que los niveles del río están muy por debajo de lo esperado. El invierno seco sumado a la bajante persistente es una combinación para una situación crítica. Esperamos que el pico de criticida sería en el tercer trimestre y el primero del año siguiente”, dijo Valdez a ÚH.
El representante de CAFyM informó que la bajante en la zona de Alto Paraná ya está afectando a la exportación de soja, así la bajante al Norte, tiene un impacto a las cargas de tránsito que son de origen brasilero y boliviano.
“Estamos tomando medidas, adelantando lo que se pueda, encaminando intervenciones de dragado. Asimismo advertimos a los clientes y usuarios sobre lo que se viene. A medida que pasan los días se va sintiendo los efectos”, dijo.
En lo que respecta a una posible interrupción de los servicios de las navieras, el empresario aseguró que se están tomando las medidas para que esto no suceda, aunque reconoció que sí se esperan demoras y sobrecostos.
La bajante reduce el transporte por el río por lo menos en 40% en términos de capacidad de carga, según explicaron desde el sector.
Desde las empresas navieras se apunta a tener un plan más amplio del manejo de la hidrovía como el único camino para paliar algo más los efectos de la reducción de los niveles del río.
La mayor parte de las exportaciones e importaciones de Paraguay se realizan a través de la hidrovía, por lo que la bajante impacta directamente en el comercio generando mayores costos en el flete.