Al igual que otros gremios relacionados con la agroproducción y la industria manufacturera, la Asociación Rural del Paraguay (ARP) lanzó un comunicado para sentar postura frente a las negociaciones entre el Mercosur y la Unión Europea (UE) para la exportación de productos. En él, afirma que si bien no aceptará injerencias ni condicionamientos de los europeos para negociar, reconoce que el sector ganadero quiere obtener mejores mercados y, por ende, mejores precios para la carne paraguaya. “No vamos a tolerar la injerencia internacional sobre nuestras instituciones, pero debemos entender que si queremos acceder a mercados para obtener mejores precios por nuestro producto, debemos producir lo que esos consumidores están dispuestos a pagar mejor, sin que esto signifique un menoscabo a nuestra soberanía ni un atropello a nuestras leyes”, asevera el comunicado de la ARP.
Al mismo tiempo, sostiene que el deseo del gremio ganadero es que “los productores tengan la libertad de elegir con quién comerciar y para ello deben disponer de todas las herramientas que le permitan competir”.
La ARP indica que se anticipó a buscar los mecanismos para satisfacer “la corriente de los consumidores más exigentes”, y hace un tiempo comenzó un trabajo conjunto con el Senacsa, con el que crearon el Sistema de Identificación Animal del Paraguay (SIAP), recientemente aprobado por ley. Esta herramienta les permitirá ofrecer a la UE las garantías que exigen de trazabilidad de los productos cárnicos, desde su origen hasta el consumidor final, afirma la ARP.
Condenados. “Si no entendemos esto, estaríamos condenados a vender commodities a mercados marginales y a precios ruines. Sin embargo, todo este esfuerzo nos permite estar entre los 10 mayores exportadores mundiales de carne, aspirando siempre a seguir ganando mejores mercados para nuestros productos”, se reafirma el gremio ganadero.
Además, la ARP menciona que Paraguay cuenta “con una de las legislaciones medioambientales más robustas y avanzadas del mundo” e instituciones que las respaldan. Asegura que impulsan “una producción sostenible con el medioambiente, inclusiva socialmente, con respeto a las leyes laborales y a los derechos de las comunidades de los pueblos ancestrales”.
“Reconocemos el esfuerzo de las autoridades nacionales para trabajar en conjunto con los sectores afectados para crear las condiciones que nos permitan adaptarnos a las exigencias de los distintos mercados y proteger nuestras fuentes de trabajo”, señala.
Trazabilidad. Los ganaderos indican en su comunicado que dentro de las restricciones impuestas por la UE, la más resaltante es que los productos afectados no deben provenir de parcelas deforestadas después del 2020 y para demostrar de dónde provienen los productos se necesita “un sistema de trazabilidad”.
“Debemos aclarar que las exportaciones de carne y derivados a la UE no alcanzan el 2% de las exportaciones totales. La aplicación de este reglamento no dejará afuera a ningún pequeño productor, como arman algunos que no conocen de nuestra ganadería. Actualmente, solo 335 productores están en el sistema de trazabilidad para exportar a UE. Ninguno pequeño”, asegura el gremio ganadero, que deja así sentada su postura de que hay que adecuarse a ciertas exigencias para ganar mercados.
Sojeros preocupados Los gremios que aglutinan a los productores sojeros están preocupados por las imposiciones de la Unión Europea a los países del Mercosur para exportar, porque implicarían una pérdida de soberanía. La UGP sostiene que el acuerdo es una “amenaza para el sector productivo del país y, en especial, para los pequeños productores”. En tanto que Fecopord pide que las condiciones de legalidad de una actividad se rijan por las leyes locales, que deben ser respetadas y no llevar el tráfico comercial al marco de las restricciones, en detrimento de la libre competencia.
A la industria le interesa potenciar al sector maquila La postura de los industriales –de acuerdo con lo expresado por Enrique Duarte, presidente de la UIP– indica que al sector manufacturero le interesa avanzar en un acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur. “Nos interesa por el potencial que tiene el mercado europeo para impulsar el crecimiento de la maquila y, sobre todo, para generar mayores ingresos mediante exportaciones que beneficien a la industria manufacturera, según resaltó Duarte, en conversación con Última Hora. “Desde la industria, buscamos maximizar el valor agregado a nuestras materias primas mediante la industrialización, para generar así mayor riqueza y puestos dignos de trabajo en el país, y no transfiriendo esa opción a otras economías”, indicó el titular de la UIP. Duarte pidió llegar a consensos entre ambos bloques, para obtener beneficios para ambas partes. “La palabra ceder es de una sola vía. En una negociación, “se cede y se obtiene”, “se otorga y se recibe”. Si estamos en una mesa de negociación es porque tenemos intereses y vamos tras ellos; lo mismo para la contraparte”, expresó. Agregó que se vislumbra, a partir del encuentro de cancilleres de la semana pasada, la intención de parte de los Gobiernos de la región de seguir negociando un acuerdo con la UE que contemple las expectativas de los países del Mercosur, asumiendo las asimetrías de las economías y buscando el respecto a las entidades nacionales, para no incurrir en costos sociales.