Se trata de uno de los percances viales como tantos, que quedan en la nada en nuestro país, donde la Justicia por ser cara en tiempo y dinero es inaccesible para la ciudadanía.
Al respecto, en uno de nuestros editoriales mencionábamos que “el Paraguay, al no ofrecer un buen servicio de transporte público, ha ido forzando a la población a resolver su problema de movilidad recurriendo a la compra de un vehículo sea automóvil o motocicleta”.
Esto lleva a la gente al caos cotidiano del tránsito, pero también al aumento de los accidentes y a su vez a la falta de Justicia rápida en caso de ser víctimas en las rutas.
Respecto al hecho citado, había ocurrido en marzo del 2023, sobre la avenida República Argentina, en zona de la Estación de Buses de Asunción. Según imágenes de circuito cerrado, Gustavo Martínez esperaba en el semáforo para cruzar, cuando repentinamente fue impactado por un auto con chapa AADE-594, guiado por José Manuel Olmedo Benítez.
Tras el choque, el motociclista quedó con varias lesiones en todo el cuerpo, pero afortunadamente sin fracturas.
Sin embargo, su herramienta de trabajo resultó destruida. Martínez trabajaba como conductor en la plataforma de viajes MotoBolt y también como delivery, por lo que su familia quedó desamparada en aquel tiempo. “No sé si el que me chocó en ese momento estaba drogado o tomado, pero no era normal, quería moverme a toda costa del suelo, no sé si para alzarme a su vehículo o para que”, relató Gustavo.
Indicó también que los testigos tuvieron que apartar al hombre, quien incluso en un momento intentó correr del lugar, pero de vuelta la gente se lo impidió. “Una vez que llegó la policía, le llevaron en una Comisaría mientras a mí me llevó una ambulancia a IPS. Un agente había anotado mi número y me llamaba constantemente para sugerirme que le larguen nomás, entonces yo le repetía que le hagan la prueba de alcotest, porque era mi prioridad, igual nunca le hicieron”, lamentó.
Martínez indicó que en principio, el responsable del accidente le prometió hacerse cargo de los gastos, incluso de reponerle la motocicleta que tenía un mes de uso al momento del accidente, sin embargo, desapareció tras pagar la multa por el hecho a la Municipalidad de Asunción.
“Yo sé que debo abrir una causa penal privada ya que Olmedo Benítez ya no me responde, pero igual espero porque primero, no quiero hacerle mal a nadie y otro porque el proceso es muy largo y costoso”, detalló Castiñeira sobre su caso.
Lo sucedido con Martínez es un motivo de constante debate acerca de una realidad cotidiana que merece la atención de todos. Nadie quiere estar involucrado en un accidente, ya sea como victimario o víctima. Sin embargo, que algunos conductores, con su desatención, alta velocidad, maniobras imprudentes o por la ingesta de bebidas alcohólicas, se predisponen a provocar situaciones viales lamentables, que luego son olvidados por las autoridades, dejando grandes pérdidas a miles de víctimas como Gustavo.