El proyecto en conjunto fue realizado atendiendo al segmento poblacional existente con problemas de locomoción y dependencia en nuestro país.
Las sillas podrán ser construidas por cualquier ciudadano con los pasos a seguir, cuyo instructivo será publicado en los próximos días en la página de PTI. “El costo de cada silla rondaría los G. 2.500.000, mientras que los prototipos comerciales pueden costar G. 13 millones, dependiendo de la característica”, manifestó el líder de la iniciativa, Luis Ortiz
En los prototipos fueron utilizados caños PVC, motores de limpiaparabrisas y de competiciones de robótica, mientras que el comando central se construyó con los profesionales del Parque Tecnológico.
Cuatro jóvenes pasantes de Politécnica participaron del armado, lo que les permitió adquirir experiencia en este tipo de iniciativas. En su mensaje, la directora ejecutiva del PTI, María Teresa Peralta, manifestó que todo el material utilizado es reciclable y que la gente puede acceder a todo lo necesario.
“Esto es tener rostro humano en el trabajo. Chicos, no se imaginan el aporte de ustedes para la gente de escasos recursos que muchas veces viven arrastrados, porque no pueden caminar y no tienen la forma de movilizarse, que no sea a través de una silla de ruedas”, manifestó.
“Nosotros somos bendecidos porque tenemos la posibilidad de darles una mano y de mejorarles la calidad de vida, para que las personas con discapacidad puedan integrarse con todo lo valioso que son a nuestra sociedad”, dijo Peralta.