El ex legislador se refería claramente al senador del PLRA, Blas Llano, quien apoyaba la candidatura de Líder Amarilla contra la de Efraín Alegre, quien resultó claro vencedor de las elecciones de ayer.
“Esto se traduce en el resultado de lo que sucedió. Sin embargo, me preocupa que ninguno de los candidatos hizo propuestas que puedan entusiasmar a la ciudadanía y esto revela la ausencia de imaginación política y rigor de coyuntura”, señaló Acevedo.
Agregó que la victoria de Alegre es “un signo alentador” porque desatará un debate sobre un hecho con el que muy poca gente está en desacuerdo: la necesidad de una gran concertación.
“No obstante, no habrá concertación sin el Partido Colorado. Lo de Fernando Lugo en el 2008 fue un éxito electoral, pero un fracaso político y no nos podemos dar el lujo que eso vuelva a suceder. No hablo del aparato del Partido Colorado, sino de la gran masa colorada que debe tener un rostro, apellidos y propuestas”, dijo de forma tajante.
Explicó que si la oposición tiene votos colorados y son “clandestinos”, entonces esa concertación sentirá que no debe nada a los colorados y por ello terminará excluyéndolos del gobierno.
Respecto a Llano, el analista expresó que es “un profesional del poder”. “Sale un poco lesionado (Llano) con esta derrota. Siempre está en la penumbra, pero debería salir a la luz”, añadió.
Gran elector. Acevedo precisó que el gran elector del 2018 será el senador Fernando Lugo, líder del Frente Guasu.
“Lugo va, de alguna manera, a orientar y dibujar horizontes de duplas o concertaciones. No se puede pensar concertación sin Fernando Lugo. Ni excluir a Nicanor Duarte, por ejemplo”, pronunció.
Añadió que lastimosamente el sistema electoral no permite “combinaciones deseables”. “Nuestro sistema no permite una dupla Marito-Lugo o Nicanor-Efraín o viceversa en ambos casos y por ello los líderes deben tener cuidado en no pensar solo en ganar, sino para qué ganar”, enfatizó.
Sobre Cartes, mencionó que está desgastado por el transcurso propio del ejercicio del poder y este resultado lo mantiene aún más en esa posición.
“Perón decía que pelearse con el poder los primeros dos años es una desubicación y apoyarlo en el último año es una estupidez”, ejemplificó.
Subrayó que el mandatario debe reformular su sistema de comunicación con la oposición, reacomodarse y volver a concertar.