EFE
“La OEA ofrece a nuestros países una plataforma equilibrada de diálogo, donde la diversidad permite un balance saludable y desalienta la polarización ideológica que ha caracterizado a muchos otros organismos regionales”, afirmó el canciller en la sesión de la Asamblea General de la organización, que concluye hoy en la capital dominicana.
“Organismos (prosiguió) que privilegiaron criterios políticos en sus decisiones por sobre aquellas facultades expresamente consignadas en el derecho internacional, a las que estamos sometidos los Estados por nuestra decisión soberana”, dijo sin concretar a qué organismos regionales se refiere.
Loizaga defendió así a la OEA, el único organismo regional que reúne a todos los países americanos (salvo Cuba), como “foro político de mayor transcendencia en el hemisferio”.
Paraguay es el único país que ha dado su apoyo explícito al secretario general de la OEA, Luis Almagro, para aplicar la Carta Democrática de la organización a Venezuela, un instrumento jurídico con el que el secretario busca aumentar la presión internacional sobre el Gobierno de Nicolás Maduro y que, de prosperar, podría llevar a gestiones diplomáticas, resoluciones o, en último lugar, a la suspensión del país suramericano del ente.
No obstante, el canciller evitó reafirmar ante la Asamblea el sí a aplicar la Carta Democrática que anunció en Washington el pasado 1 de junio la embajadora de Paraguay ante la OEA, Elisa Ruiz Díaz, en el Consejo Permanente que aprobó una declaración conciliadora de apoyo al diálogo en Venezuela.
Loizaga se limitó a apoyar que Almagro pidiera la convocatoria del Consejo Permanente del día 23 para examinar el estado de la democracia en Venezuela, al invocar el artículo 20 de la Carta el pasado 31 de mayo.
“Apoyamos la convocatoria de la sesión Extraordinaria del Consejo Permanente, el próximo 23 de junio, para realizar una apreciación colectiva de la situación en Venezuela”, afirmó.
“En los términos más respetuosos al principio de no intervención en los asuntos internos y apelando al principio de solidaridad regional ofrecemos todo nuestra colaboración para trabajar en la búsqueda del entendimiento, el diálogo y el respeto mutuo entre las fuerzas políticas y el Gobierno de Venezuela”, señaló.
“Para que el pueblo venezolano (prosiguió), constructor de su propio destino, alcance una solución democrática y pacífica conforme a los procedimientos señalados en la propia Constitución de ese país”, añadió.
A petición de Venezuela, la OEA recibirá el día 21 en su sede de Washington a los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero (España), Leonel Fernández (República Dominicana) y Martín Torrijos (Panamá), que encabezan la iniciativa diálogo entre Gobierno y oposición venezolana auspiciado por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
La misión de Venezuela se adelanta con este paso a la sesión convocada para el 23 de junio para debatir si la OEA aplica su Carta Democrática a Caracas, que, de prosperar, podría llevar a gestiones diplomáticas, resoluciones o, en último lugar, a la suspensión de Venezuela del ente.