El socialista demócratico Zohran Mamdani fue elegido alcalde de Nueva York el pasado martes, convirtiéndose en la primera persona de ascendencia surasiática y el primer musulmán, así como el más joven desde 1892, en ocupar el cargo. Se enfrentó al republicano Curtis Sliwa y al ex gobernador de Nueva York, Andrew M. Cuomo, quien perdió las primarias demócratas contra Mamdani y se presentó como independiente en las elecciones generales. El actual alcalde, Eric Adams, también se postuló como independiente, pero se retiró y decidió dar su respaldo a Cuomo. El político progresista afirma con orgullo que es joven, musulmán y un socialista demócratico, algo por lo que “no tiene que disculparse”. Proclamó que Nueva York seguirá siendo una ciudad de inmigrantes, construida por inmigrantes y, de ahora en más, liderada por un inmigrante. Mamdani nació en Uganda y es hijo de la prestigiosa cineasta india Mina Nair, egresada de la Universidad de Harvard, como lo es el padre del alcalde electo, Mahmood Mamdani, que imparte clases en la prestigiosa Universidad de Columbia. Atacado frecuentemente en campaña por el veterano Cuomo por su supuesta falta de experiencia, Mamdani se defendió argumentando que su juventud tenía dos alicientes: La arrogancia de un sentido innato de la posibilidad y la humildad porque un joven no lo sabe todo, por lo que debe rodearse de expertos.
La elección se caracterizó por una participación récord. Mamdani obtuvo más de un millón de votos, más que ningún otro alcalde desde la década de 1960. El presidente Trump había amenazado con retener fondos a la ciudad de Nueva York si Mamdani ganaba. El día de las elecciones, Trump incluso trató de estúpido a cualquier judío que votara por Mamdani.
La victoria de Mamdani no fue un hecho aislado, sino que se produce en un contexto de importantes derrotas republicanas en todo el país durante la jornada electoral. Entre los casos más destacados se encuentra el estado de Virginia, donde los demócratas recuperaron el control total del poder ejecutivo estatal, ya que Abigail Spanberger ganó la gobernación, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar dicho cargo, y los votantes también eligieron a Ghazala Hashmi como vicegobernadora electa de Virginia, convirtiéndola en la primera mujer musulmana elegida para un cargo ejecutivo estatal en todo Estados Unidos. Asimismo, el demócrata Jay Jones derrotó al fiscal general republicano en funciones de Virginia. Del mismo modo, los demócratas obtuvieron resonantes triunfos en California, donde los votantes aprobaron un nuevo mapa electoral que podría ayudar a los demócratas a obtener cinco escaños adicionales en el Congreso, en una medida para contrarrestar el intento de Texas de redistribuir los distritos y ganar cinco escaños en la Cámara de Representantes (este proceso se denomina redistritación, o “gerrymandering” en inglés, y ha sido utilizado por ambos partidos para obtener una mayor cantidad de escaños con los mismos votos). Asimismo, en Nueva Jersey, la congresista demócrata Mikie Sherrill ganó la elección a gobernadora. En Pensilvania, los demócratas mantuvieron el control del Tribunal Supremo estatal después de que tres magistrados demócratas ganaran sus elecciones. En la ciudad de Minneapolis, el alcalde demócrata Jacob Frey derrotó al candidato socialista demócratico Omar Fateh.
Por su parte, el presidente estadounidense, Donald Trump, que durante la campaña electoral trató a Mamdani de comunista y amenazó con arrestarlo y deportarlo, reconoció la noche del martes que el Partido Republicano ha perdido las elecciones locales y las contiendas claves de esta jornada electoral y consideró que las razones fueron que su nombre no estaba en las papeletas de votación, además del cierre del Gobierno federal por falta de acuerdo entre los congresistas republicanos y demócratas para elevar el techo de la deuda federal.
Sin embargo, Mamdani fue quien obtuvo la victoria más resonante y, dada la importancia de Nueva York como la ciudad más poblada de los Estados Unidos, es relevante examinar las principales propuestas del alcalde electo. En líneas generales, estas se enfocan en hacer a la ciudad más asequible y en lograr una mejoría para la gran masa de ciudadanos que deben lidiar con precios significativamente altos en materia de vivienda, alimentos, educación y transporte.
Entre ellas, se incluyen un plan para crear el primer programa universal de cuidado infantil de la ciudad de Nueva York, la gratuidad del transporte público y la congelación del alquiler para un millón de inquilinos con renta estabilizada (viviendas con un techo máximo de monto de alquiler). Asimismo, ha propuesto un impuesto a los residentes más ricos y un aumento en el impuesto de sociedades para financiar sus propuestas, las cuales sus críticos consideran poco realistas. Como alcalde, Mamdani necesitaría la aprobación de la legislatura estatal y de la gobernadora para un aumento de impuestos, algo difícil de lograr. De hecho, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, quien respaldó a Mamdani, ha declarado que no apoyará un aumento de impuestos para los más ricos, argumentando que no quiere que los líderes empresariales abandonen el Estado.
A continuación se detallan algunas de las políticas más relevantes propuestas por el alcalde electo. En primer lugar, Mamdani propone crear cinco supermercados subvencionados por el gobierno de la ciudad, uno en cada distrito de la misma, con el objetivo expreso de aumentar la competencia en el mercado de alimentos y lograr así la disminución de precios al consumidor. Esta es una de las ideas más controvertidas de Mamdani, que sus críticos comparan con el racionamiento de alimentos durante el régimen soviético y otras dictaduras comunistas, críticas que Mamdani refuta afirmando que no habría monopolio estatal, y que los consumidores seguirían teniendo una amplia variedad de tiendas donde comprar.
En segundo lugar, Mamdani propone el cuidado infantil de cobertura universal. El costo del dicho cuidado ha alcanzado niveles críticos en la ciudad de Nueva York, una de las ciudades más caras del mundo. La propuesta de Mamdani implementaría el cuidado infantil gratuito para todos los niños de la ciudad de Nueva York de entre seis semanas y cinco años de edad y ampliaría los programas preescolares existentes, lanzados durante una administración anterior. Mamdani pretende financiar su propuesta mediante impuestos a las personas con altos ingresos y a las grandes empresas, con las dificultades ya descritas anteriormente respecto de los tributos estatales. Sus críticos afirman que no habrá suficientes fondos para implementar el programa.
Otro de los programas propuestos por el nuevo alcalde se centra en la implementación de un sistema de autobuses gratuitos. Mamdani convirtió los autobuses en un pilar de su campaña, proponiendo ampliar un programa piloto implementado durante la pandemia, y eliminar el cobro de pasajes en todos los autobuses urbanos. Mamdani ha propuesto ampliar los carriles exclusivos para autobuses con el fin de agilizar el tráfico urbano. Su propuesta de autobuses gratuitos se financiaría mediante el aumento del impuesto estatal a las empresas, así como del impuesto sobre la renta de los neoyorquinos que ganan más de un millón de dólares al año.
La victoria de Mamdani marca un hito en la política de la ciudad de Nueva York y, posiblemente, a nivel estatal y federal, dependiendo de sus resultados. De todos modos, es importante tener en cuenta que la dinámica de las elecciones a nivel de ciudad es muy distinta que las otras dos. En todo caso, unos resultados positivos de las propuestas de Mamdani podrían suponer un serio desafío para los republicanos y su líder, el presidente Donald Trump. A falta de un año para las elecciones legislativas de medio término, el socialismo democrático, representado por figuras como Bernie Sanders, así como el sector izquierdista del partido demócrata, podrían ganar relevancia y obtener espacios de poder tras la dura derrota en noviembre de 2024. La habilidad de Mamdani para implementar su programa político ciertamente jugará un rol estratégico en esta dinámica.