BUENOS AIRES - ARGENTINA
La ex presidenta argentina Cristina Fernández fue inculpada ayer junto a sus hijos de asociación ilícita y lavado de activos, con embargo de bienes y prohibición de salir del país, quedando judicialmente cercada en un año electoral.
El revés ocurre en momentos en que sus seguidores le reclaman que vuelva al ruedo político y se presente a las elecciones legislativas de octubre como gran rival del partido de Mauricio Macri.
El juez Claudio Bonadio, además de inculparla por corrupción, ordenó un embargo por 130 millones de pesos argentinos (poco más de 8 millones de dólares) en el caso judicial conocido como Los Sauces, nombre de la empresa familiar, precisó el Centro de Información Judicial (CIJ).
Este es el caso que más complica a Cristina, que antes de ejercer la presidencia de Argentina, entre 2007 y 2015, ocupó cargos como diputada y senadora nacional. Se trata de la cuarta inculpación judicial que sufre Kirchner desde que dejó el gobierno en diciembre de 2015.
El magistrado también prohibió la salida del país de todos los procesados: la exmandataria, sus hijos Máximo y Florencia, y a varios empresarios, entre ellos Cristóbal López y Lázaro Báez.
Según la resolución, Fernández, de 64 años, fue procesada como “autora penalmente responsable” de los delitos de asociación ilícita en calidad de jefe en forma real con el delito de lavado de activos de origen ilícito agravado por su habitualidad y de negociaciones incompatibles con su calidad de funcionaria. Florencia y Máximo Kirchner fueron procesados por formar parte de una asociación ilícita, en tanto los empresarios López, Báez, Fabián De Sousa y Osvaldo Sanfelice fueron inculpados en calidad de organizadores.
La Saga. Protagonista de una saga judicial con varias causas y denuncias en su contra, la ex presidenta afrontará su primer juicio oral, aún sin fecha, acusada de causar perjuicio al Estado en un polémico caso de operaciones cambiarias del Banco Central al final de su mandato. Esa causa también está a cargo del juez Bonadio.
Son varias las causas que pesan sobre Kirchner, la mayoría en relación a casos de corrupción. Sin embargo, “la del dólar futuro es la más favorable a ella”, explicó a mediados de marzo el analista político Rosendo Fraga.
La propia ex presidenta había solicitado al juez Bonadio elevar el caso a juicio oral.
En diciembre, Kirchner fue inculpada por otro juez de asociación ilícita y fraude al otorgar obras de infraestructura por 2.200 millones de dólares a un empresario.
En su última declaración jurada de mayo de 2016, la exjefa de Estado figura con un patrimonio de casi cinco millones de dólares en efectivo y bienes inmuebles, que incluyen una firma hotelera familiar llamada Los Sauces.
La ex presidenta denunció que es víctima de una persecución política.