A iniciativa del colorado Óscar Tuma, quien no apoya el juicio político a los ministros de la Corte Suprema de Justicia, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó ayer por unanimidad un proyecto de resolución por medio del cual se fijan fechas para los descargos de los altos magistrados que fueron denunciados por mal desempeño en sus funciones.
El documento fue planteado de manera estratégica por Tuma, quien aprovechó que el liberal Eusebio Alvarenga, uno de los firmantes del libelo acusatorio, no estaba en la sala de sesiones, ínterin en que el también liberal Víctor Ríos, otro de los que no apoyan el enjuiciamiento, entretenía al colorado Ramón Romero Roa. Además jugó a favor del proyectista que la mayoría generalmente no atiende qué aprueban en mociones sobre tablas (en el momento).
De esta manera, concretaron la maniobra para impedir que el enjuiciamiento de los altos magistrados se haga en este diciembre, tal como pretenden los que presentaron el libelo acusatorio.
Con la resolución, se fijaron fechas para que los magistrados realicen sus respectivos descargos. Para los días martes 2, 9, 16 y 23 de diciembre fueron convocados el titular del Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE), Alberto Ramírez Zambonini, y los ministros de la Corte, Sindulfo Blanco, Víctor Núñez y Miguel Bajac.
Mientras que para los días miércoles 3, 10 y 17 fueron llamados los magistrados César Garay Zuccolillo, Antonio Fretes y Gladys Bareiro de Módica.
Los magistrados realizarán sus descargos ante los miembros de la Comisión de Asuntos Constitucionales y de los diputados que deseen estar presentes.
Un punto estratégico del documento señala que sin este trámite previo no se podrá fijar fecha para convocar a sesión extraordinaria u ordinaria, con el objeto de estudiar los pedidos de juicio político.
DORMIDOS. Posterior a la aprobación, algunos diputados fueron alertados de lo que aprobaron y esto generó malestar, principalmente en Alvarenga, quien no ocultó su enojo y calificó la resolución de nula e inexistente.
Manifestó que es el Senado el que debe llamar a los ministros y no los diputados.
Ante estas declaraciones, Tuma, quien no ocultó su alegría tras la maniobra, señaló que lo que se desea es atajar un poco el balón, analizar las circunstancias y dar una salida institucional al enjuiciamiento de los ministros citados.
Indicó que existen coincidencias en que tienen que darse los cambios en la Justicia, “pero (se debe) realizar un proceso transparente, planteando la reforma del Poder Judicial”, remarcó.
De acuerdo con el legislador, no se le durmió a nadie para la aprobación del proyecto y resaltó que la autoridad máxima de la Cámara es el pleno y fue aprobado por unanimidad.
La resolución puede ser revocada por otra, pero debe ser tratada en una sesión. Si el proyecto es incluido en el orden del día, se necesita de una mayoría simple para su aprobación, pero si se trata sobre tablas como ayer, se necesita de la mayoría de dos tercios.