Blanca Colmán tiene un establecimiento ganadero en la zona de Río Verde, a 7 km del centro urbano de Villa Hayes. Allí comenzó a invertir en infraestructura confiada en que la venta de ganado sería un buen negocio, pero varios problemas viene enfrentando desde hace años.
Para hacer frente a la falta de energía eléctrica, comentó a ÚLTIMAHORA.COM que montó su propio transformador, pero igualmente sufre apagones debido a conexiones clandestinas que se realizaron en su propiedad. A pesar de las denuncias que presentó a la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), no logró que la institución verifique la situación.
A esto se suman las ocupaciones que se registran en la zona y cuyos responsables, según Colmán, son personas que no necesariamente carecen de una vivienda, pues suele observar que se trasladan en camionetas.
Los caminos inaccesibles son una constante para la ganadera, quien, pese a pagar en tiempo y forma sus impuestos, no ve la retribución de los recursos en la comunidad, que debe sortear las inundaciones y puentes caídos en su trayecto.
Justamente la acumulación de lluvia caída puso en peligro a sus animales, pero se quejó que el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) dio de baja a 25 ganados sin verificar si realmente estaban muertos.
Ahora le quedan solo 16 animales para la venta, el resto fue robado y si bien realizó la denuncia por abigeato los policías no realizaron un rastrillaje en las inmediaciones para hallar a los responsables.
Desde hace años Colmán acude a las autoridades por sus diversas quejas, pero no recibe respuestas.