“Fue muy divertido, la gente salió muy contenta y los ganadores se llevaron de premio estatuillas hechas en hierro forjado por el ciclista Roger Armoa, nuestro mini Hermann Guggiari. Tenía la forma de un ciclista con una lupa”, explicó Fernando Rodríguez, el coordinador general del evento, que además contó con el respaldo de la Senatur, la Comuna y la Secretaría de Políticas Lingüísticas que preparó los acertijos en yopará que los participantes debían responder; de lo contrario, pagar prendas.
Se establecieron cuatro categorías por afinidad: familiar, con padres e hijos; amistad, entre amigos de infancia o vecinos; laboral, con los jefes o compañeros de trabajo, y romance, en el cual competían las parejas.
El evento fue muy creativo y los participantes recorrieron distintos puntos emblemáticos de la ciudad, como la Casa de la Independencia, Palacio de López, Plaza Uruguaya, Panteón de los Héroes, entre otros, donde los atletas iban sorteando postas.
El paseo arrancó muy temprano desde el Panteón de los Héroes y se extendió hasta el mediodía.
“Esta vez rompimos el molde, lo hicimos no por edad como suele ser, sino por afinidad, además vendimos las entradas vía Red UTS, no desde los talleres de bici, para jerarquizar un poco más el evento y todos quedaron muy contentos”, indicó Rodríguez.