El fiscal Óscar Samuel Valdez lo convocó para que brindase su versión de los hechos ante el Ministerio Público, pero el agente se negó a declarar. El mismo guarda prisión preventiva actualmente en la Agrupación Especializada de la Policía, en Asunción.
Supuestamente, el 10 de enero, Arévalo y los dos concejales circulaban en una camioneta en un camino en Zanja Pytá, cuando fueron demorados por dos policías antidrogas que quisieron revisar el vehículo. El suboficial y los políticos amenazaron a los agentes con armas largas para que no los revisen.
APELACIÓN. Paralelamente, se conformó el tribunal de Apelaciones para estudiar las apelaciones presentadas por los concejales Quevedo y Bogado para que se revoque su prisión preventiva. Ambos están recluidos en la cárcel regional.
Los camaristas Hugo Grance y Jesús Lird, además de la jueza de feria Mirtha Sánchez deberán resolver en los próximos días si los ediles permanecerán o no en prisión.
El juez José Valiente había dispuesto la reclusión de estos debido a que había peligro de que obstruyan la pesquisa. Posteriormente, Valiente se inhibió y el caso quedó con la jueza Sady López.
