El fiscal Yoan Paul López Samudio imputó a la mujer y a Marc Gaston Henri Boydens, gerente del local, por la supuesta comisión de los hechos punibles de procesamiento ilícito de desechos, exposición de personas a lugares de trabajo peligrosos y comercialización de alimentos nocivos.
López solicitó al juez Penal de Garantía de turno que los imputados sean beneficiados con medidas alternativas a la prisión.
Deberán presentarse de forma obligatoria periódicamente ante el juez o autoridad competente, tienen prohibido cambiar de domicilio y salir del país. Se fijará una fianza real para asegurar el sometimiento de los encausados al proceso.
Según consta en el acta de imputación, el fiscal López cuenta con suficientes elementos de convicción que indican que la viuda incurrió en conductas penales en su carácter de propietaria de la fábrica de empanadas Don Vito.
La investigación se realizó ante el Ministerio Público por parte del Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición (INAN) tras la denuncia de algunos clientes y los mismos empleados del local.
Estos últimos fueron los que difundieron y presentaron como pruebas ante Defensa del Consumidor las imágenes que se volvieron virales en las redes sociales, donde se ven ratas y sus crías entre las empanadas que posteriormente son comercializadas.
La INAN se constituyó en el lugar y constató que las condiciones de salubridad no se cumplían y que se pudo incluso causar intoxicación alimentaria a los clientes.
En el allanamiento realizado el pasado viernes se encontraron carne, verduras, jamón y queso entre otros alimentos en descomposición, que estaban dispuestos para ser utilizados en la elaboración de productos.
Los salones de producción, específicamente donde se procesa la masa para las empanadas, no contaban con elementos de seguridad como extintores, ni manual de procedimientos para evacuación de los funcionarios. Las tuberías y cañerías también estaban en total estado de deterioro.