Eduardo fue baleado por un vecino identificado como Diego Armando López Benítez. El disparo le causó graves lesiones en la cabeza y su pronóstico era poco alentador. En la víspera con mucho dolor, el también hermano de la víctima, Audelio Giménez, confirmó la noticia.
Asimismo, los familiares, amigos y vecinos de Eduardo y Wilfrido se manifestaron ayer frente a la unidad de la fiscala Alicia Sapriza para exigir el cambio de carátula, de homicidio culposo a doloso, en la causa del suboficial Hugo Sanguina. El policía obtuvo la prisión domiciliaria.