Giubi manifestó en Radio Monumental AM que el caso de malaria importada registrado en el este del Paraguay “no es para preocuparse”. Explicó que un joven de 21 años trajo la enfermedad desde la zona del Amazonas.
Tuvo un cuadro febril, estaba con un tratamiento incompleto y ya estaba con el diagnóstico cuando llegó al país. Estuvo por unos días acá, pero volvió al Brasil, donde completó su tratamiento.
Nuevamente retornó a Paraguay y ya sus estudios dieron negativo. De acuerdo con el médico, falta un estudio más que dé nuevamente negativo para cerrar el caso.
Para evitar el brote de nuevos casos, el grupo del Servicio Nacional de Erradicación del Paludismo (Senepa) realizó el bloqueo; además tomó muestras y brindó charlas de orientación a los docentes y demás estudiantes para tomar las medidas correctivas.
La malaria o paludismo se transmite entre humanos a través de la picadura del mosquito anófeles. Después de la infección, los parásitos actúan por el torrente sanguíneo y en los órganos.
Sus síntomas son fiebre y cefalea que, generalmente, se dan en horarios de la mañana y la tarde, a diferencia de otras enfermedades transmitidas por vectores, como el dengue, que desarrolla otros malestares en el cuerpo humano.
El país estaba libre de malaria, pero ahora con este caso se tendrá que esperar unos meses para obtener la certificación de país libre. No se registran casos autóctonos desde el 2011.