Jóvenes, niños y adultos recorren las calles con la imagen en andas como muestra de su devoción, informa la corresponsal Nancy Méndez.
Este año también se hacen presentes los miembros de la Asociación de Jinetes de Ciudad del Este con sus indumentarias correspondientes, que le dieron un color diferente a la celebración.
Por su parte, los bomberos voluntarios también acompañaron con sus carros hidrantes y recorrieron las calles hasta llegar a la capilla Divina Misericordia.
El sacerdote Guillermo Steckling declaró el lugar como centro de la Divina Misericordia de la Diócesis de Ciudad del Este.
Los feligreses tienen la intensión de que posteriormente pueda ser un santuario, por lo que se encuentran trabajando en ello.
“Necesitamos G. 100 millones para adquirir el terreno de al lado, estamos dispuestos a pagar un préstamo”, manifestó Marcial, vicecoordinador de la mencionada capilla.
Para que pueda ser un santuario la capilla debe crecer en infraestructura, por lo que tienen proyectado comprar el terreno aledaño que tiene un costo de aproximadamente G. 200 millones.
“Prácticamente ya tenemos la mitad gracias a las actividades que realizamos, pero nos falta todavía, por lo que solicitamos la colaboración de los hermanos católicos”, indicó Fermín Olmedo.
La procesión se realiza desde hace ocho años por en el día de la Divina Misericordia.