Habló de “arreglar el tema de la reelección, independizar el Poder Judicial, aprobar la Ley de ética en el ejercicio de la legislatura, donde los legisladores sean juzgados, sancionados y multados por un consejo de ex legisladores multipartidario”.
Con esto, también fustigó las ventajas que buscan permanentemente los parlamentarios, de quienes dijo que se parecen más a la realeza europea que a los principales ejecutores de la democracia.
Felippo abogó para que se instituyan nuevas reglas en torno al accionar de los congresistas, ya que “nadie se debería quejar, porque el candidatarse a legislador es un acto de voluntad personal y nadie lo obliga”, según destacó.
Al hacer referencia a la corrupción que molesta y hasta deprime, lanzó también dardos al Poder Judicial, al que calificó de ineficiente y que constituye una de las principales causas de no tener lo básico de una buena democracia.
Por eso, pidió independencia y equilibrio de poderes; al tiempo de mencionar que la interacción de la sociedad civil con el Estado no está funcionando correctamente, con lo que se debería construir mejor la interrelación.
Entre sus demandas, también saltó el hecho de que el sector industrial no fue convocado a ninguna reunión preparatoria donde se les haya consultado sobre los rubros beneficiados con el arancel cero, por parte de Taiwán.