Los sindicatos afiliados a la Central Unitaria de Trabajadores Auténtica (CUT-A), junto con las CGT, CNT, CPT y la CUT, se congregaron en la Plaza Italia, desde donde marcharon hasta la Catedral Metropolitana, en donde la Asociación de Taxistas solicitaba también mayor protección jurídica.
Alberto Gaona, secretario de Conflictos de la CUT-A, dirigió duras criticas contra el gobierno de Santiago Peña, “cuya ausencia se nota” y que avala el pisoteo diario de los derechos laborales de los trabajadores. ”No sé en qué país vive exactamente Santiago Peña, pero vemos que ‘él está mejor’, mientras el pueblo está cada vez peor. Estamos siendo arrastrados por su política nefasta de gobierno”, expresó Gaona.
Además, manifestó que en el Día del Trabajador no hay nada que celebrar y pidió a la ministra de Trabajo, Mónica Recalde, a quien tildó de “inútil”, que defienda a los trabajadores. También denunció el caso de la trabajadora despedida de forma injustificada del casino del diputado Yamil Esgaib, a pesar de contar con 10 años de antigüedad y estando en periodo de lactancia materna.
Sector Público. Los sindicatos de diversos ministerios y entes del Estado, como el Frente Sindical y Social, el Sindicato Nacional de Médicos (Sinamed) y el Sindicato de la ANDE (Sitrande), además de otras organizaciones sociales y estudiantiles, también protagonizaron una numerosa marcha, que se inició en la Plaza Uruguaya y culminó frente al local del Ministerio del Trabajo, Empleo y Seguridad Social (Mtess), en donde realizaron un acto central.
En el lugar, los manifestantes reclamaron mejores condiciones salariales, libertad sindical, seguro social, el respeto a las 8 horas laborales y la no precarización para estos sectores laborales, pues “no todos los funcionarios públicos ganamos como los nepobabies”, denunciaron.
Además, los trabajadores sindicalizados lamentaron que la cartera del Trabajo sea indiferente a la situación de explotación en que viven los indígenas en el Chaco. “Esta institución nefasta no hace lo mínimo para proteger los derechos laborales, por eso salimos a las calles”, indicó Estela Invernizzi, del Frente Sindical Clasista.
Entre tanto, la doctora Rossana González, presidenta del Sindicato Nacional de Médicos, exigió salarios acordes a la responsabilidad de salvar vidas, un seguro social para el sector, buen descanso y permiso remunerado por maternidad.
La Corriente Sindical Clasista (CSC), que mantiene una posición mucho más crítica y cuestionadora frente al Gobierno, realizó en la mañana de ayer un acto con sus adherentes frente al Panteón Nacional de los Héroes. En la ocasión, Eduardo Ojeda dirigió un duro discurso en el que criticó la precarización laboral y la falta de trabajo formal y digno, situaciones que afectan al 70% de la población, que solo traen “hambre, miseria, sufrimiento y migración de las y los trabajadores”, dijo. Se quejó, además, de que el salario mínimo que percibe la mayoría de los trabajadores “es una burla”, porque no alcanza y solo significa hambre para el trabajador y su familia. “Los lugares de trabajo como las fábricas parecen cárceles, los obreros están tras barrotes de hierro, entre altas murallas, cámaras para el control, vigilantes armados, capataces que humillan a los trabajadores, trabajos forzosos, insalubres y peligrosos, que hacen que los obreros mueran en sus puestos laborales”, sentenció Ojeda.