Tanto viviendas como cultivos agrícolas terminaron con serios daños debido a los fuertes vientos y la caída de granizos, casi del tamaño de un puño.
El fenómeno climatológico empezó en horas de la tarde del martes y se extendió hasta la madrugada de ayer. Además de las casas y fincas afectadas, en Itapúa, se registró la muerte de siete ejemplares vacunos a consecuencia de la caída de rayos.
Entre los distritos itapuenses más golpeados, figuran Edelira, Tomás Romero Pereira, Capitán Meza, Natalio, Itapúa Poty y parte de San Rafael del Paraná (nordeste de Itapúa), donde varias familias reportan daños en sus casas.
Los daños de las viviendas se refieren principalmente a la rotura o perforado del techo producto de la caída de granizos. Las víctimas señalan que los granizos eran del tamaño de una fruta de limón o similar al huevo.
Asimismo, la intensa granizada causó importantes daños, principalmente en cultivos de renta de las familias.
CASAS ROTAS. En Alto Paraná, el temporal arreció sobre los distritos de Minga Guazú, Tavapy, Raúl Peña y Ciudad del Este. Desde la Gobernación, informaron que más de 1.000 familias resultaron afectadas en esos cuatro municipios.
“La cantidad de afectados sigue aumentando. En este momento, no podemos ofrecer un número exacto, pero estamos hablando de un total aproximado de 1.000 familias hasta ahora, y los pedidos de asistencia no dejan de llegar”, señaló Estanislao Gómez, de la Secretaría de Acción Social de la Gobernación.
En Minga Guazú, el granizo perforó los techos de fibrocemento, especialmente en los kilómetros 14, 15, 18, 19 y 30, donde al menos 500 viviendas resultaron afectadas.
Los pobladores también se vieron afectados por la falta de energía eléctrica durante gran parte del día, mientras las cuadrillas de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) trabajaban para restablecer el servicio. En el camino de tierra que conecta Tavapy con Yguazú, la caída de varios árboles de eucalipto obstaculizó el tránsito vehicular. AR/ WF