Mientras que el acuerdo es bien visto por algunos considerando la posibilidad de obtener más recursos financieros, especialistas del sector energético advirtieron que el aumento de la tarifa, en condiciones como las que se plantea, viola el tratado de la binacional y genera una pérdida financiera para nuestro país.
El ingeniero Germán Escauriza criticó que el Gobierno paraguayo maneje el asunto “a las escondidas” y enfatizó que las autoridades están subiendo artificialmente la tarifa, por sobre el costo efectivo de la generación de la hidroeléctrica. “Esto es muy delicado porque nuestro principal activo líquido son las binacionales y el Gobierno está manejando el asunto a escondidas, se viola totalmente el protocolo que recomienda la forma de abordar temas de esta naturaleza con un país de mayor desarrollo económico”, indicó.
pérdida. Adicionalmente, el ingeniero Ricardo Canese resaltó que en caso de subir la tarifa a USD 19,28 kW/mes, esto representa más del doble que el costo real del servicio, que después de pagarse toda la deuda está en torno a USD 9 kW/mes. Sostuvo que la referencia significaría para la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) un costo de USD 1.403 millones/año, en caso de adquirir el 50% de la potencia instalada disponible de contratar, “una cifra fuera de su alcance”, dijo.
“En cambio, si la tarifa se fijara igual al costo del servicio, como establece el Tratado, la ANDE debería pagar USD 655 millones/año, cantidad que sí está dentro de sus posibilidades y que, de hecho, es casi lo mismo que pagaría ahora por contratar el 20%”, añadió. “Santiago Peña se empeña en violar el Tratado de Itaipú y la Constitución, fijando una tarifa muy superior al costo del servicio, poniendo en grave riesgo a la ANDE y al sistema eléctrico nacional”, agregó.
Según su visión, se pretende que la ANDE no contrate el 50% de la potencia, que no pueda ejercer la soberanía hidroeléctrica y no pueda exportar a precio de mercado la energía que el país no consume, lo que generaría “por lo menos USD 1.800 millones/año más de beneficios, a precios de hoy, y no unos pocos centenares de millones de dólares anuales”, acotó.
inconsistencia. Por otra parte, el ingeniero Pedro Ferreira, ex presidente de la ANDE, explicó que todavía no se tiene información oficial sobre el acuerdo, pero resaltó el contrasentido de una tarifa que se establecerá en USD 19,28 kW/mes durante tres años y luego se reduciría a USD 10 kW/mes, lo que en la práctica representa una reducción en promedio para los próximos años. “Lo que hiciste en la práctica fue bajar de USD 16 (kW/mes) a 12 o a 13”, puntualizó. Sin embargo, apuntó que Paraguay debe “ponerse las pilas”, utilizar bien los recursos adicionales y buscar compradores de su energía. “Es muy importante que esos recursos se usen bien”, dijo.
- La tarifa de Itaipú subiría a USD 19,28 kW/mes, más que el costo real
del servicio que, después de pagarse toda la deuda, está en torno a USD 9 kW/mes.
- Con esa tarifa, la ANDE debería pagar USD 1.403 millones/año, para el 50% de la potencia instalada disponible de contratar.
- Si la tarifa se jara igual al costo del servicio, como establece el Tratado, la ANDE debería pagar USD 655 millones/año.
- Exportar la energía que Paraguay no consume a precio de mercado daría al país por lo menos USD 1.800 millones/año más de beneficios.
Un aspecto que llama la atención y genera suspicacia es el silencio del Gobierno de Paraguay sobre el acuerdo, considerando que los detalles conocidos al respecto, al menos hasta el momento, se filtraron desde el lado brasileño. Ayer corría la versión de que se podía tener una comunicación oficial por parte del Poder Ejecutivo, pero esto finalmente no ocurrió. Las autoridades consultadas se escudaron en la prudencia y en la necesidad de cumplir con los trámites para evitar confirmar los términos del acuerdo con el Brasil.