Obreros equipados con herramientas adecuadas limpiaron la boca de desagüe, ubicado en la esquina de las avenidas Concejal Romero y la avenida del Lago, frente a la oficina regional de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE). La boca debe estar limpia para evitar desborde.
En esta ocasión la corriente agua no arrastró grandes cantidades de basuras, como suele ocurrir cuando cae mucha lluvia como la registrada durante toda la jornada del martes pasado. Esa basura, junto a los camalotes a veces suelen taponar la boca de desagüe provocando el desborde del lago, cruzando sobre la avenida Concejal Romero.
El trabajo de limpieza y colocación de una red de drenaje (un tejido de metal) de basura, esta vez resistió. Fue instalado por técnicos ambientales de la Municipalidad de Ciudad del Este, cerca del puente Pexoa, ubicado en el extremo sur del lago, justamente para evitar que basura de todo tipo termine en el lago.
EL AÑO PASADO. La tarea se realizó en octubre del año pasado, pero luego de una gran lluvia, la red literalmente fue arrastrada por la fuerza del agua del arroyo Amambay, afluente del lago, creado en la década del 60. La protección se volvió a instalar con un sistema de seguridad, que quedó demostrado que funciona. Lamentablemente los asentamientos urbanos instalados a lo largo de la franja de protección, convirtieron a este arroyo en un vertedero de todo tipo de basura, hasta de animales muertos.
Este gran espejo de agua, creado a partir de la represa del arroyo Amambay sirve de fuente para la provisión de las Plantas de Tratamientos de agua de la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap) y de la Itaipú Binacional. Esta última provee del vital líquido a su complejo habitacional distribuida en las áreas 1, 2, 3, 4, 5 y 8. (el Área 5 está ubicada en Presidente Franco y es la única que ya fue vendida a sus ocupantes).