Las opiniones quedaron divididas tras la socialización del proyecto de ley que será presentado y que consiste en la modificación de las figuras penales de homicidio culposo y exposición al peligro en el tránsito terrestre, con el fin de endurecer penas para los alcoholizados que provocan accidentes fatales.
La propuesta lanzó el senador Eduardo Nakayama, quien con otros legisladores prevén hacer cambios, primero en la figura de exposición al peligro en el tránsito terrestre, eliminando la alternativa de multa y elevando la pena hasta cinco años de cárcel si uno conduce bajo efectos del alcohol u otras sustancias.
También se suma la inhabilitación por un periodo de 18 meses para conducir y, en caso de reincidencia, se prevé la revocación definitiva de la licencia.
En cuanto al artículo 105 del Código Penal, del homicidio culposo, se quiere elevar la pena hasta diez años de cárcel en los casos en que haya múltiples víctimas fatales o imprudencia extrema del autor.
Hoy ese artículo tiene una expectativa de pena de 3 a 8 años de cárcel si uno maneja bajo la ingesta de bebidas alcohólicas u otras sustancias.
Al respecto, el abogado Ricardo Preda, en contacto con la Monumental 1080 AM, consideró que se trata de modificaciones que buscan ser un justificativo para decir que se está legislando.
“Yo creo que no tiene impacto en ninguno de los dos sentidos. Ni la suba es tan importante, ni el efecto que va a tener mucho menos”, citó.
Continuó diciendo que “lamentablemente, producir la muerte porque uno conduce bajo los efectos de una sustancia es una cuestión que, difícil la combinación con una pena mayor vaya a persuadir a que la gente beba antes de conducir”.
Explicó que quizás la cuestión está más en la educación de estos casos y en el control preventivo de que no se conduzca.
“Se plantea la modificación de un artículo que ya fue modificado y que es el de homicidio culposo que, cuando va acompañado de otro delito, como la conducción bajo los efectos del alcohol, el marco penal sería de 3 a 10 años. Sería subir dos años más la pena máxima a este hecho punible”, precisó.
Resaltó la importancia de la intervención que la Policía Nacional realiza en el lugar del accidente y explicó que los efectivos policiales deberían estar capacitados para detectar si el conductor está bajo los efectos de alguna sustancia.
ÚLTIMOS CASOS. Los últimos hechos de conductores inconscientes que manejan bajo los efectos del alcohol o las drogas prendió la alarma de varias autoridades que ven con preocupación los accidentes fatales que van en aumento.
En los últimos días, el hijo de la concejala departamental Isidora Benítez, en estado de ebriedad, chocó con su camioneta contra un funcionario del Juzgado de Carapeguá, quien terminó falleciendo.
Así como este caso, en los últimos meses, no pararon los accidentes con derivación de muerte, donde el alcohol fue determinante y hoy familias lloran las pérdidas.
Uno de los hechos que sigue causando conmoción es el triple choque que provocó Eugenio Sanabria, quien alcoholizado, al mando de su Volkswagen Tuareg, embistió contra dos automóviles, en San Bernandino, el año pasado.
Dejó como saldo fallecidos a un matrimonio y su hijo de 4 años, además de otra mujer que iba en otro vehículo.