Cecilia Rodríguez manifestó que vive en el barrio Sajonia, de Asunción, y que estaba trabajando en un encuentro empresarial, mientras que su marido y sus dos hijos estaban en su domicilio.
Comentó que alrededor de las 20:10 de este jueves, recibió un mensaje de su hijo de 15 años que le decía “mamá tengo miedo, nos están robando parece”. El menor le dijo que era la Policía Nacional y posteriormente, su otro hijo, de 12 años, la llamó a decirle que vaya a la vivienda.
La mujer manifestó que al llegar a la casa encontró a los agentes del Departamento Antinarcóticos de la Policía Nacional, luego llamó a su abogado y preguntaron a los intervinientes qué es lo que pasaba.
Dijo que el fiscal Guillermo Sanabria le manifestó que se trataba de un allanamiento porque tienen datos que ahí había “movimiento sospechoso”.
Las mujer le aseguró que no sabía de qué le hablaba porque hace 22 días se mudó a vivir en el domicilio.
Le encañonaron con ametralladora, denuncia
Aseguró que su hijo le contó que los agentes entraron, le encañonaron con ametralladora, y le dijeron que se coloque en el piso.
“Lo hicieron arrodillar, poner los brazos atrás y lo apuntaron, a dos menores uno tiene 15 años y otro tiene 12 años. Le apuntaron en la cabeza, frente al fiscal Guillermo Sanabria”, expresó a radio 1000 AM.
Además, contó que los policías acusaron a su hijo de tener droga en su mochila y le exigieron que les muestre.
“Los chicos no durmieron nada en toda la noche. Están en shock”, lamentó.
Lamentó que los agentes hayan roto su portón para ingresar en su domicilio.
Por último, aseguró que los agentes le robaron 50.000 pesos argentinos a su madre y sus ahorros de G. 10 millones. Además una de las policías supuestamente comió todo su maní “porque estaba nerviosa”.
Versión de la Fiscalía
Por su parte, el fiscal Guillermo Sanabria explicó a NPY que se remitieron informes de inteligencia al Ministerio Público, por parte de la Policía Nacional, en los cuales se señalaron dos viviendas que podrían estar implicadas en la comercialización al menudeo de estupefacientes.
Dijo que luego del trabajo de inteligencia del Departamento de Antinarcóticos de la Policía Nacional, con fotografías y con análisis de toda la información que recabaron, solicitaron a la Fiscalía el allanamiento a las casas.
En la primera vivienda fue localizada una persona, que según la Policía, podría formar parte del Clan Rotela y estaría dedicada a la venta de estupefacientes en la zona. Incautaron un arma de fuego, estupefacientes, una balanza de precisión.
En el segundo domicilio en donde se ingresó a través de la apertura forzosa fue encontrada una persona mayor de edad y dos menores. Se verificó todo el lugar y no se encontraron estupefacientes.
“Cuando ya nos íbamos a retirar del lugar llegaron varias personas desconocidas para mí por lo menos, a una de ellas sí les conozco, porque le conocí al padre de uno de los que estaba en el lugar. Me saluda con total normalidad, en ningún momento yo actúe de manera prepotente. No creo que alguien con tanta facilidad me hable y me salude si es que se le estaba encañonando”, expresó.
Dijo que desconoce las motivaciones de las personas que realizan ese tipo de comentarios y que él no presenció que se le encañonó a ningún menor de edad, tampoco que se llevaron dinero.
“Yo no voy a estar protegiendo ese tipo de conducta. Ingresamos, le encontramos a una sola persona, se revisó la casa porque teníamos mandamiento para hacerlo. Cuando íbamos retirarnos del lugar llegaron gente y comenzaron a increparnos y para no confrontar decidimos retirarnos”, dijo.
Por último aseguró que cuentan con todos los documentos correspondientes y que están tranquilos.