Imágenes a las que accedió ÚH muestran la magnitud del taponamiento del río Paraguay, a la altura del kilómetro 1.321 del río Paraguay, en la zona de Pilar, Departamento de Ñeembucú.
El pasado viernes tanto el Gobierno como el sector privado decidieron volver a cerrar este punto para el paso de embarcaciones, por un plazo de 72 horas; es decir, hasta el lunes a las 06:00.
La medida se da para que la draga ubicada en la zona pueda operar a tiempo completo y rehabilitar la navegación a un mejor calado, el cual, actualmente está solo en torno a los 10 pies, por lo que las cargas superiores no pueden cruzar en la zona.
Raúl Valdez, del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos (CAFyM), explicó que la decisión de volver a cerrar el paso en la zona crítica se tomó debido al taponamiento de la confluencia por los sedimentos y debido a que la congestión de embarcaciones se redujo en un 90%, respecto a lo registrado la semana pasada, cuando unas 500 barcazas quedaron varadas en la zona.
La excesiva sedimentación en el cauce hídrico, en su desembocadura con el Bermejo, es algo que se considera habitual para la temporada veraniega. No obstante, la situación se hizo crítica, ya que a esto se le suma la bajante del río Paraguay. Se espera que a medida que llegue el otoño, se reduzca el arrastre de los sedimentos que dificultan la navegación.
Impacto. Las demoras y complicaciones para la navegación comercial tienen un impacto directo en el costo del flete para las importaciones y exportaciones del Paraguay. Recordemos que, cerca del 75% de la economía local tiene algún tipo de vinculación con la hidrovía Paraguay-Paraná.
Flete. La crisis en el Bermejo se da a las puertas de la temporada de exportaciones de cargas de soja, lo que genera preocupación en el sector productivo. Por otro lado, se tomaron medidas especiales para que los convoyes cargados con combustibles puedan pasar por el punto crítico y así garantizar el abastecimiento del mercado local.
Desde el Centro de Importadores del Paraguay (CIP) y CAFyM hablan sobre importantes demoras y sobrecostos para el flete debido a la situación en la desembocadura del Bermejo. No obstante, hasta el momento, no se cuenta con datos porcentuales sobre la incidencia en los valores del transporte pluvial.