Así lo expresó el jefe de Estado en un extenso escrito publicado en su cuenta de X en el que se refiere a las informaciones sobre el asedio del pasado jueves a la Corte Suprema de Justicia por un grupo de manifestantes afines al Gobierno, así como a un supuesto abucheo el sábado a su esposa, Verónica Alcocer, en el Carnaval de Barranquilla.
“Los medios de comunicación, en su mayoría, tanto el viernes (sic) como ayer sábado, han construido dos burbujas comunicacionales por completo falsas”, aseguró el gobernante.
“Intentan construir lo que se llama el lawfare (guerra jurídica), es decir, que la Justicia tome partido contra el Gobierno y hunda no solo las reformas, sino al Gobierno mismo”, afirmó el presidente.
Petro añadió que esa situación “ha pasado en Ecuador, Brasil, Paraguay, Perú, Guatemala, Argentina y lamentablemente el resultado no solo son fuerzas políticas encarceladas, golpes de Estado, sino el incremento de la violencia y la toma mafiosa de los Estados mismos a sangre y fuego”.
Desde comienzos de mes, Petro ha alentado movilizaciones en las calles alegando que su Gobierno es víctima también de una supuesta “ruptura institucional” orquestada por el fiscal general, Francisco Barbosa, que termina su periodo este lunes y con quien tiene serias diferencias políticas.
JUSTICIA INVESTIGA A SU ENTORNO. La Fiscalía investiga a varias personas del entorno de Petro, entre ellas a su primogénito, Nicolás Petro Burgos, procesado por enriquecimiento ilícito y lavado de activos.
Al referirse a la elección por la Corte Suprema de la fiscala que debe suceder a Barbosa, Petro dijo que su gobierno “ha presentado una terna de mujeres decentes y capaces...” y que “no hay razón alguna para no elegir entre ellas”.
En la votación del jueves pasado, ninguna de las tres obtuvo los requeridos entre los 23 magistrados de la Corte Suprema de Justicia.
Ante esa situación, la vicefiscala Martha Mancera, que relaciona a Petro con presuntos encubrimientos a mafias, quedará encargada de la Fiscalía a partir de mañana hasta que sea elegida la sucesora de Barbosa. Esa indefinición llevó a manifestantes a bloquear los accesos al Palacio de Justicia para impedir la salida de los magistrados, que finalmente fueron sacados del edificio horas después por la Policía. EFE