Según el documento, el juez es acusado por los hechos punibles de prevaricato, producción y uso de documentos públicos de contenido falso, persecución a inocentes e inducción a un subordinado a un hecho punible, informó el corresponsal Édgar Medina.
Cubas y su abogado manifestaron en su denuncia que el juez Marecos realizó una persecución política contra él, Celso Miranda y Jorge Britez, presumiblemente por instrucciones recibidas de parte de Javier Zacarías Irún y la senadora Zulma Gómez, que son “padrinos” políticos, según el denunciante.
Cubas viene protagonizando una serie de incidentes desde que agredió con su cinto al juez penal de garantías Amílcar Marecos y luego defecó en su oficina durante la audiencia de imposición de medidas.
El magistrado lo envió a prisión, mientras que a los otros les otorgó la prisión domiciliaria, que luego fue revocada por la Cámara de Apelaciones.
En la penitenciaría, Cubas aplicó tres cintarazos al juez de ejecución Carlos Víctor Bordón, además de arrojar piedras trituradas a la camarista Rocío Gossen, a quienes acompañaba la abogada Nuris Montiel, representante de los Derechos Humanos de la Corte Suprema de Justicia. La comitiva había ido a visitar a otro interno cuando fueron agredidos.