“Esta mejora posicional refleja simplemente el deterioro a nivel mundial de otros países y no necesariamente por un cambio relevante en el resultado global de Paraguay. En ese sentido, el único país de Sudamérica que también ha presentado un ascenso tan marcado fue Uruguay (44 en 2020), que mejoró 10 posiciones en la escala mundial (34 en 2021)”, según parte del documento.
En la evolución de estos indicadores, según se registra en el análisis citado, en 2001 Paraguay se ubicaba por debajo del promedio regional, con un puntaje de 60,3; alcanzando incluso el pico negativo más bajo en el año 2005, con 53,4 puntos. Esto estaba asociado al debilitamiento del gobierno y las instituciones, cesación de pago parcial de las deudas del sector público, elevada corrupción, etc.
Sin embargo, a partir del 2010 hasta la actualidad logró posicionarse por 12º año consecutivo por encima del promedio de la región de las Américas, cuyo puntaje promedio en el año 2022 es de 59,4.
reformas. Cabe resaltar -según narra el contenido del reporte- que el punto de inflexión del año 2005 hacia mejores posiciones tiene su explicación esencialmente en las reformas tributarias introducidas, presupuestos públicos superavitarios con la consecuente reducción de la razón deuda/PIB y algunas reformas legales en el ámbito financiero.
En torno a la evolución histórica de los cuatro pilares analizados en nuestro país, el índice en cuestión propone un análisis novedoso en comparación con ediciones anteriores. El propósito de esta sección dentro del documento es presentar y analizar la evolución de los 12 indicadores, para los 4 pilares, en la historia reciente del Paraguay, considerando un marco temporal más amplio e identificar factores que pudieron incidir puntualmente en los cambios observados.
Un pilar es el estado de derecho. En lo relacionado a derechos de propiedad, según el índice de libertad económica 2022, si bien la Constitución de 1992 garantiza el derecho a la propiedad privada, la realidad muestra debilidades, dada la falta de estudios y registros de propiedad ágiles y confiables, generando dificultades en la adquisición de títulos de propiedad de la tierra y, a su vez, vulnera los derechos de propiedad y los contratos, particularmente en el interior del país.
En lo referente a tamaño de gobierno, se expresa que la fuerte caída en la Salud Fiscal de -21,8 puntos se debe principalmente a que el gasto público ascendió al 23,1% del PIB en los últimos tres años; el déficit fiscal promedió 4,2% del PIB.
Las regulaciones son débiles
“En Paraguay, el marco regulatorio general (uno de los pilares analizados en el reporte sobre libertad económica) solo apoya débilmente la actividad empresarial dinámica.
Teniendo en cuenta el puntaje individual alcanzado en cada indicador, el país cayó de las filas de los “moderadamente libres” en la libertad empresarial, ya que los costos y burocracia para iniciar un negocio o emprendimiento aumentaron durante la pandemia, aunque, por otro lado, para el 2022 se observa una mejoría en la puntuación”, según el informe.
También la apertura de mercado es uno de los pilares: el informe refiere que el valor total de las exportaciones e importaciones de bienes y servicios equivale al 69,8% del PIB. Paraguay tiene 8 acuerdos comerciales preferenciales vigentes, con una tasa arancelaria promedio aplicada es de 6,5%, mientras que se mantienen 16 medidas no arancelarias vigentes.
la cifra
11
posiciones escaló Paraguay en el ránking, a nivel mundial, pero no por un cambio relevante en su resultado global.