Otros 6 sospechosos fueron detenidos en el marco de esta acción que busca pacificar algunas barriadas de Río, escenario los últimos días de violentos choques entre miembros de bandas rivales que intentan controlar estas zonas para desarrollar sus actividades ilícitas.
Según indicó la Policía Militar en un comunicado, los agentes fueron atacados por criminales armados durante su incursión en diversos puntos de las comunidades.
Como consecuencia de esos enfrentamientos, 9 sospechosos fueron alcanzados por disparos y no resistieron a las heridas, de acuerdo con la corporación, que no especificó de dónde partieron los tiros que terminaron con la vida de esas personas.
Fuentes de la Policía Militar confirmaron que los fallecidos son todos hombres adultos y no portaban identificación alguna, por lo que se les realizará una pericia forense para saber su identidad a partir de las huellas dactilares.
En el operativo también fueron aprehendidos 5 fusiles, una subametralladora, 4 pistolas y otros materiales, como estupefacientes, munición y teléfonos móviles. La acción se desarrolló en las favelas Caixa D’Água y Morro do 18, en el barrio de Quintino, así como en otras comunidades situadas en las zonas norte y oeste de Río, esta última con fuerte presencia de grupos parapoliciales. Muchas de las favelas de Río están controladas por bandas de narcotraficantes, que suelen entrar en conflicto con milicias, integradas por ex policías o agentes en activo corruptos y con poder de influencia en la política fluminense, por el control de diversas áreas de la ciudad y su zona metropolitana.
La pandemia del coronavirus provocó, sin embargo, un ligero descenso en los altos índices de violencia del estado de Río, que en 2020 registró 3.536 homicidios, 12% menos que el año anterior y la menor cifra de las 3 últimas décadas.
investigan filtración. Por otro lado, la Policía Federal de Brasil informó que abrió una investigación para verificar la filtración y posible venta de datos personales de más de 223 millones de personas, entre las que estarían ciudadanos, autoridades y hasta el propio presidente del país, Jair Bolsonaro.
Fuentes policiales confirmaron la apertura de la investigación, días después de que una empresa de seguridad cibernética hiciera una alerta sobre la filtración de los datos, que incluyen informaciones sensibles como nombre, fecha de nacimiento, carné de identidad, dirección y renta, entre otros.
La filtración fue revelada en un reportaje publicado hace unos días por el rotativo O Estado de S. Paulo, que denunció también la venta de los datos por parte de los hackers en la internet profunda, como es conocido el contenido en línea que no está indexado por los motores de búsqueda convencionales.