Las vacunas salvan vidas y el acceso a estas debe estar garantizado para todos, al tiempo de seguir el ‘‘compromiso con las medidas de prevención necesarias’’ con ‘‘paciencia, con celo por la vida y responsabilidad con todos’’.
Con este mensaje, los obispos paraguayos finalizaron ayer su encuentro en la 230 asamblea de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP), en Casa Pastoral Monseñor Juan Sinforiano Bogarín, desde donde llamaron a todos a seguir trabajando en la prevención del contagio del SARS-CoV-2 y en el acompañamiento de enfermos con Covid, de sus familias, y de todo el personal de salud.
Los religiosos en su comunicado recordaron que el Covid-19 es una enfermedad grave que requiere la atención profesional a tiempo y las medidas terapéuticas específicas. ‘‘Es necesario que la administración pública siga brindando los recursos requeridos en esta emergencia, y se consolide el compromiso con la salud de nuestro pueblo’’, indica el documento de la CEP.
Menciona que el esfuerzo mancomunado de la ciencia, la medicina, los comunicadores sociales y las comunidades religiosas ayudan a disipar temores, aclarar dudas y promover la atención debida de todos los sectores de manera solidaria, garantizando la equidad en el acceso a las vacunas y a los recursos médicos.
Los obispos también lamentaron tanta inseguridad, violencia, secuestro y atropellos a indígenas que ‘‘ponen en zozobra a toda la comunidad y enlutan a algunas familias. ‘’Exhortamos a los responsables de la seguridad y la Justicia a reforzar los medios para garantizar el respeto a los bienes y a la vida de toda la población’’.
También presentaron la Carta Pastoral Itaipú, una oportunidad de diálogo y concertación social para el bien común, donde se propone un diálogo nacional para brindar soluciones a la inequidad y a la pobreza.
Educación en pandemia
Los obispos recibieron el trabajo de la Pastoral educativa que señala que las tecnologías fueron herramientas importantes en la cuarentena, pero no sustituyen el contacto y el acompañamiento personal requeridos en el proceso educativo; así como fue evidente la brecha digital en las desiguales condiciones de acceso a los medios telemáticos. Asimismo, la CEP aprobó de forma experimental en escuelas católicas delineamientos pedagógicos, didácticos, teológico-doctrinales y científicos para la educación de la sexualidad y la afectividad para la escuela católica del Paraguay.