El Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi se prepara para recibir a miles de aficionados y turistas que llegarán al país con motivo de la final de la Copa Conmebol Sudamericana de este sábado 22.
En ese marco, mañana, viernes, a las 09:45, será inaugurada oficialmente la ampliación del sector norte de embarque de la terminal aérea, con la presencia del presidente de la República, Santiago Peña.
Rubén Aguilar, director de Aeropuertos, destacó que las obras comprenden 2.200 m² de nueva área, un espacio que considera clave para mejorar el flujo de pasajeros. “Esto va a pasar a la historia, porque como cualquier aeropuerto del mundo, el espacio de 2.200 m² es muy importante”, afirmó.
El nuevo sector incluye equipos modernos de rayos X, con bandejas retornables automáticas, y la ampliación de las casillas de Migraciones, que pasan de siete a diez puestos de atención. El acceso al área de check-in también fue reorganizado: La entrada estará ubicada hacia el ala norte.
Aguilar explicó que el aeropuerto trabaja con todas las instituciones involucradas para garantizar una operación fluida: Despachantes, Aduana, Migraciones, Policía Nacional, Fuerza Aérea, controladores, operadores de tierra, seguridad aeroportuaria y propietarios de hangares.
Recordó que la experiencia del año pasado servirá como base para la gestión del importante flujo de aeronaves y pasajeros previsto para este fin de semana.
Las compañías aéreas regionales ya presentaron solicitudes de vuelos chárter. Entre ellas figuran Azul, Latam, JetSmart, Gol, Aerolíneas Argentinas, Flybondi y la brasileña Sideral.
Aguilar confirmó que están previstos alrededor de 34 vuelos chárteres desde Argentina y Brasil, aunque la cifra podría variar según la demanda final.
Solo en este concepto –sin contar los vuelos comerciales regulares– se estima que arribarán entre 4.500 y 5.000 pasajeros exclusivamente para la final. Señaló que el mayor movimiento se dará al término del encuentro deportivo, cuando los aficionados regresen directamente al aeropuerto para salir del país. “Todos querrán salir una vez que termine el partido. Algunos esperarán dos, tres o cuatro horas”, advirtió, por lo que se trabaja para ofrecer comodidades durante la espera.
Aguilar anticipó que el movimiento en el aeropuerto aumentará desde finales de noviembre con el inicio de las vacaciones y la llegada de compatriotas por las fiestas.
“Este año prácticamente no sentimos la diferencia entre temporada alta y baja”, señaló, citando el flujo constante generado por congresos, actividades culturales y eventos deportivos.